El candidato a la Alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria por el Partido Hablemos Ahora, Jorge Lahoud, solicita “la inmediata destitución de la Concejala del Área, como máxima responsable de todo lo sucedido, después de esta penosa puesta en escena de una de nuestras principales fiestas, la Cabalgata de Carnaval, que por cierto, ninguna televisión, ni pública ni privada retransmitió el evento” y exigimos además que, “el Alcalde de Las Palmas de Gran Canaria dé la cara ante la indignación de los participantes y empresarios afectados, en la peor Cabalgata de Carnaval que se recuerda”.
Para Jorge Lahoud todo se puede resumir básicamente, en poco ambiente, poca participación, mala organización y muchísima improvisación.
Según Lahoud, después de 2 años sin cabalgata, la gente tenía muchas ganas de recuperar una fiesta tan popular y arraigada entre nosotros. Pero una vez más, la nefasta y pésima gestión del Alcalde y de la Concejala del Área de Servicios Públicos y Carnaval, tiró por tierra la ilusión de los vecinos, de los participantes y de los empresarios.
Lahoud afirma que será recordada como la cabalgata exprés, la cabalgata de la improvisación y la cabalgata de la inseguridad. En resumen la peor Cabalgata de Carnaval que se recuerda en Las Palmas de Gran Canaria en toda su historia.
Eran las 19:30 y ya la cabecera había llegado a su destino, todo un record. Todo a un ritmo de vértigo, donde no había ni separación entre carrozas y la música se entremezclaba. En tan solo dos horas y media, fin de la historia.
Y lo más grave, el candidato a la Alcaldía por Hablemos Ahora se pregunta: ¿qué se pretendía que hicieran los participantes después de la cabalgata?
Está clarísimo, por parte del consistorio, que irse a su casa, pues no se había organizado ningún mogollón, ni ninguna actividad alternativa, para el disfrute de los vecinos y participantes. Miles de personas se concentraron en las inmediaciones del Parque San Telmo, sin saber a dónde ir, ni cómo ir, ya que los transportes públicos brillaban por su ausencia. Y todo este dislate, dio paso a un escenario de un macro botellón incontrolado por parte de muchos, donde la seguridad fue otro de los gravísimos problemas que se encontraron a la llegada de las carrozas al Parque San Telmo, ya que era una empresa privada de seguridad y no la policía local, fruto del conflicto con el ayuntamiento por el pago de las horas extras.
Pero la cosa no acabó con el fin de la Cabalgata. Ésta mañana después de más de 12 horas de finalizar, las inmediaciones del Parque San Telmo amanecieron sin limpiar, todo lleno de suciedad y de muchos “recuerdos” de los participantes.
Jorge Lahoud afirma que, está claro que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, no nos deja de sorprender en negativo, por su falta de gestión, organización y dejando todo a la improvisación, cosa a la que habitualmente nos tienen acostumbrados en este mandato.