El Ayuntamiento de Telde tendrá que recurrir a la gestión externa para realizar los enterramientos y las labores de adecentamiento de los dos cementerios de la ciudad, el de San Juan Bautista y el de San Gregorio, ambos atendidos hasta ahora por dos monjes de Hermanos de la Resurrección y dos funcionarios municipales. El anuncio de la marcha de los religiosos, que se unirán al prior de la orden en el camposanto capitalino de San Lázaro, deja este servicio sin atención por la tarde. Además, los 9.278 nichos entre ambos camposantos, hace necesario contar con más personal, ya que los funcionarios municipales cumplen el horario matinal y son los frailes quienes se quedan a cargo de todo por la tarde, sin días libres ni vacaciones.
Agustín Arencibia, concejal de Cementerios, adelantó esta decisión después de la entrevista mantenida ayer con el prior de Hermanos de la Resurrección, Fernando Pérez del Pulgar Sánchez, cita que volverá a repetirse el próximo lunes para exponerle al religioso la propuesta del Ayuntamiento. En la reunión, a la que también asistieron los hermanos Bruno y Doroteo, Arencibia les informó que la deuda que mantiene el Ayuntamiento con la orden -más de 22.000 euros- “se solucionará en los próximos días” . “Hablamos sobre el escrito que presentaron el 19 de mayo donde yo pensaba que era por la deuda, pero me han dicho que nada tiene que ver, aunque quiere cobrar cuanto antes”, apuntó el edil. En ese escrito, el prior informaba de que solo quedan tres monjes de los Hermanos de la Resurrección en Gran Canaria y no hay nuevas vocaciones. Ante esta situación y por la edad de los tres frailes, han decidido agruparse en San Lázaro, donde el superior de la orden ya no tiene capacidad para hacerlo todo.
El titular de Cementerios les expuso que sigan prestando el servicio durante un tiempo “el que yo tenga para buscar una alternativa a esto y terminarán marchándose porque no tienen posibilidad humana de continuar con el servicio”. Arencibia les ha pedido un margen de tiempo “para de aquí hasta el lunes, cuando he quedado con ellos, hacer las gestiones necesarias para encontrar una alternativa a esto y concretar con ellos hasta que fecha van a seguir prestando servicio y pueda entrar alguien a sustituirlos. Ya veremos cómo lo hacemos, pero con trabajadores municipales se me antoja complicado de forma definitiva, puede ser por dos o tres días o una semana, pero no de forma continuada por las circunstancias que todos sabemos”. En opinión del edil nacionalista, “habrá que buscar una alternativa fuera del Ayuntamiento y estamos a ver de aquí a la semana que viene habrá que tomar una decisión, voy a probar todas las posibilidades”.
El grupo de gobierno seguirá con la redacción del pliego de condiciones de prestación de servicios, donde se barajaba el pago de 35.000 euros anuales para los adjudicatarios, pero éstos ya han anunciado que no se presentarán a la convocatoria. Así las cosas, Agustín Arencibia descartó que se incremente la cantidad para hacerla más apetecible a los futuros interesados, ya que la idea es no gastar más de lo establecido en el presupuesto para esta partida. “Estamos barajando una oferta interesante, pero prefiero esperar para no crear falsas expectativas”. Hasta entonces, serán los monjes los que continuarán con la atención en los dos cementerios, no han dado fecha para marcharse, pero todo parece indicar que no estarán después del verano. “Los intentaré liberar cuanto antes de esta tarea por sus condiciones físicas y de edad”, añadió el edil.
La Provincia-Dlp
