El acoso y derribo de un político, es el objetivo consistente, en voltearlo como un becerro, con la simple ayuda de sus actos diarios. Se ha conseguido, derribarlo de su trono, dentro de la policía municipal de Telde y todo ello, gracias a la cantidad de mentiras, que él solo se ha dedicado a distribuir, por los medios allegados y afines, a su trono.
Él, nunca destacó, por ser un fiel cumplidor de nada, más bien destacaba, por ser un manu-militari, dictador político, que, o se estaba con él, o contra él. Aún, estamos esperando, que diga el motivo por el cual, a su vehículo privado, se le cambian los aceites dentro de los garajes de la policía municipal. Pero, ha resultado, que el mismo se ha dejado coger en sus mentiras y la alcaldesa, lo cambia de concejalía, creyendo, que con ello se acaba el asunto.
Pues va a ser que no, que aún me gustaría continuar con el acoso y nuevamente derribarlo de su pedestal, cosa que voy a intentar, día sí y día también, hasta que éste vividor político, se marche a su casa, de donde nunca debió salir. Como decían en una película, NUNCA DEBISTE CRUZAR EL MISSISSIPPI, en éste caso NUNCA DEBISTE CRUZAR EL PUENTE DE LOS SIETE OJOS.
¿Quién puñetas es el tal JUAN MARTEL, para salir ahora con 200.000 euros, según él, sobrantes de una partida destinada al Consorcio de seguridad de la isla, para gastarla en la compra de vehículos a la policía municipal de Telde?
Veamos, ¿si existía ese dinero, a que es debido que no lo utilizara antes, para renovar los vehículos policiales o repararlos? No entiendo, como ahora, si existe dinero y antes no. No entiendo, como éste impresentable político, puede salir ahora a cambiar el árbitro en la mitad del partido y se lo admitan.
¿Qué le debe la alcaldesa de Telde, para admitir una tras otra, las paridas verbales y salidas de tiesto, del “PROFESIÓN CONCEJAL” ?, es inaudito, que eso pase, aunque la realidad sea otra y es que, sin él, no se mantiene la silla consistorial y él lo sabe, si señores, lo jodido, es que él lo sabe y lo explota, hasta que le vuelva a explotar en sus morros.
De la noche a la mañana, ya está pidiendo presupuestos a las casas de coches y aquí, nadie dice nada. ¿Existirán comisiones y ya lo está dejando caer?, no lo sé, lo que si se, es que, si existieran comisiones, me enteraré y por supuesto que de inmediato las expondría en los medios.
El “DE PROFESIÓN CONCEJAL”, ahora nos sale con, que desea disminuir la flota y unificar las concejalías, lo que permitirá ahorrar en seguros y en gasolina. ¿Ahora, ahora nos sale con éstas?, es usted un impresentable, ¿cómo se le ocurre ahora, después de todo lo sucedido, venirnos con ahorros?, si usted no ha ahorrado en su vida, ni con aquellas huchas de metal, que daba la Caja Insular de Ahorros.
Ya puestos, como todo lo suyo consiste en engañar al prójimo y continuar subido al machito, yo le aconsejo que vaya a una empresa que está vendiendo unas nuevas motos para la policía, como la que expongo en la imagen de éste artículo, es mi opinión, que, ya sé que no le gusta, pero es lo que hay. Si usted se ríe de nosotros, yo también tengo derecho a reírme de usted, cosa que practico todos los días, en eso consiste su política reír y reír, por no llorar.
Lo mejor que puede hacer usted, es decirles en confianza, o comunicarles, a los policías municipales de Telde, que igual que hace años, sus compañeros hacían servicios a pie, pues que éstos, los de hoy, muy modernos ellos, vuelvan a caminar, que eso es sano, muy sano y ya puestos si le hacen falta medios, tire de LA GUANCHANCHA, que para eso está, para ayudar al prójimo, en éste caso a sus policías municipales.
Ahora, estamos esperando la última suya y es, si por fin van a cobrar los que actuaron en los Carnavales del 2016, aunque, ponemos en duda si cobraran los que actúen estos días en el Carnaval del 2017, cosa poco probable. Me juego lo que ustedes quieran, que ni los del 2016 y los del 2017, van a cobrar nada, eso será otra deuda más a sumar al debe.
Ahora, se puede entender, el motivo por el cual, Telde nunca tiene dinero para nada, si cuando hay se despilfarra y cuando no hay, se engaña a los proveedores. Así, claro que le salen las cuentas a usted, que siempre está disparando con pólvora mojada.
Doramas