Esta tarde he escuchado al alcalde de Telde, Juan A. Peña, en la entrevista que le hizo, el compañero y amigo Juan Santana, en esRadio Las Palmas, y he llegado a la conclusión de que no hay nada peor que ser un cínico político. Peña no ha dicho nada nuevo y se ha dedicado a decir medias verdades propio de las personas que lo enturbian todo con el único fin de que nadie pueda distinguir entre falsedad, y hechos contrastados.
Miente de plano cuando dice que siempre que le llaman para una entrevista está disponible para los medios de comunicación, desde Onda Guanche y Canarias Informativa, se le ha instado para una entrevista más de una vez, y se ha hecho el loco, por lo que le decimos que falta a la verdad una vez más.
Ahora resulta que según el alcalde, el que los plenos estén vacíos de contenido, es culpa de la oposición que no hace aportaciones, negando la mayor de que no exista una hoja de ruta del grupo de gobierno.
Patinando se quedó ante la batería de preguntas que le hicieron sobre las facturas Gestel, a lo que respondió con evasivas y mentiras demostrables aduciendo nula responsabilidad sobre el sectarismo con determinados medios de comunicación a la hora de insertar publicidad institucional, como si no fuera el presidente de dicha empresa municipal.
Triste actitud de alguien que llevó como eslogan de campaña, “con la verdad por delante” que a pesar de permitir acciones reprochables, sostiene no estar enterado de lo que el mismo autoriza a través Gestel.
Este es el retrato del alcalde de Telde, y válgame Dios que me gustaría que fuera de otra manera, se ampara en la ironía y el sarcasmo cuando comparece ante los medios y miente de forma rotunda, sin importarle que la documentación le esté demostrando lo contrario de lo que dice.
Lo más repugnante del cinismo en política, es que se juega con la buena fe de los ciudadanos, como si estuvieran convencidos que los mismos son imbéciles que ni comprenden ni discurren.
Maribel Castro; directora de canariasinformativa.com
Foto: Canarias7
