Los socios de Coalición Canaria, que han hecho con sus votos alcalde a Héctor Suárez, Nueva Canarias y Más por Telde, bajan la cabeza y tragan para seguir manteniendo sus sueldos y sillones.
Carmen Hernández traga las críticas que ella misma lanzaba contra Héctor Suárez y Gloria Cabrera, cuando siendo concejales de Nueva Canarias se marcharon y abrazaron al Partido Popular de Mari Carmen Castellano para formar parte de su Gobierno. Hay que recordar que en aquel momento, Nueva Canarias decidió retirarle el sueldo a Gloria Cabrera para dárselo a Celeste López, el hecho de quedarse sin sueldo hizo que el matrimonio se fuera de NC y entrara al gobierno de PP-CC y se les diera una nómina. Ahí comenzó a verse el «interés político» del matrimonio.
La líder de Nueva Canarias en Telde es cómplice de los desastres de Héctor Suárez en su primer mes de alcalde, resumido en: subida de sueldos, sacar el mercedes de la cochera y usarlo como vehículo oficial, contratar a su mujer y darle un sueldo como universitaria, sin serlo, e irse de vacaciones sin llevar 30 días en la alcaldía. Carmen Hernández traga, no le queda otra, pero también olvida, que las segundas patas en los pactos son las más castigadas por la ciudadanía. Tiempo al tiempo.
Juan Francisco Artiles traga, y Más por Telde traga. No les queda otra. Del discurso de «la dignidad» ha pasado a lo indecente o indigno. Del «no pactaré nunca con Carmen Hernández ni Nueva Canarias» ha pasado a caer en la mayor de las trampas y mientras «traga». Condenado a callarse y someterse, el más débil del pacto, y el delegado a guardar silencio si quiere quedarse con el sueldo y dos asesores. Artiles traga. No le queda otra.
Juan Carlos Ramírez Ruiz, colaborador de ONDA GUANCHE
