La ciudad de Telde tiene actualmente 7.062 viviendas vacías, ya sean públicas o privadas; mientras que los demandantes de casas inscriptos en el registro asciende a 3.792. Si se lograra una mayor coordinación entre propietarios y administraciones, podría suplirse con creces la necesidad. «No podemos seguir teniendo gente sin casa y casas sin gente» puntualizó la alcaldesa Carmen Hernández. En toda Canarias explicó que son 130.000 los inmuebles cerrados.
La primera regidora mantuvo ayer un encuentro con los directores del Instituto Canario de la Vivienda, José Gregorio Pérez, y de Visocan, Víctor González. Con ellos se abordaron muchos asuntos candentes para el municipio, como el compromiso en la rehabilitación de las viviendas del Valle de Jinámar, además de los edificios de Los Marinos en Melenara.
Pérez explicó que se buscaran fórmulas para desbloquear la situación de viviendas vacías, tanto las públicas y también las particulares, ya sean de entidades bancarias como de promotores, para que entren en el mercado del alquiler.
La primera regidora calificó de positiva y necesaria la reunión porque abre el camino para coordinar este asunto entre las administraciones y dar respuesta a uno de los mayores problemas que sufre la población, como es el tema de perder o no poder pagar una casa. En este sentido, explicó que entre 2009 y 2015 unas 2.000 personas han pedido ayuda en el municipio por estar en una situación extrema en relación a las viviendas.
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