Los vecinos que residen en los edificios anclados en el cruce entre la calle Suecia y Lugo, situadas en el barrio de Las Medianías, llevan casi un año esperando que el Ayuntamiento de Telde se haga cargo del cambio de los cables sueltos de una de las paredes de los edificios de esa zona. Estos están sujetados manualmente por una cuerda, de forma muy inestable y expuestos a todo tipo de peligros. Preocupados por lo que podría llegar a pasar en un futuro no muy lejano, los habitantes de estas calles piden por una solución inmediata.
«Están ya muy dañados, y con las lluvias que estamos teniendo últimamente en el municipio nos preocupa que puedan desprenderse del todo porque una cuerda no está preparada para situaciones adversas como estas», explica Raúl Santana, presidente de la asociación de vecinos del barrio. «Esperamos que no ocurran males mayores, pero para ello hace falta que alguien se haga cargo ya de este problema.»
Los vecinos aseguran que han avisado de manera continua sobre este problema, y a pesar de que hace unos meses los dueños actuales dieron parte a Endesa y unos técnicos de la empresa eléctrica se acercaron para examinar la zona todavía no se ha hecho nada al respecto. «Nos dijeron que no podían actuar hasta que desde Alumbrado Público -concejalía al cargo de Agustín Arencibia- comprobasen los cables y dieran el sí», explican. Lo que no entienden es por qué no se ha procedido a arreglar el desperfecto si «hace meses que está abierto el expediente, pero nos dan largas». El desconocimiento ante el estado del proceso para el arreglo de los cables hace pensar que todavía no se está haciendo nada para paliar esta traba que llevan arrastrando desde hace mucho tiempo, y que cada vez les atemoriza más.
Y el por qué de la soltura de estos cables se responde retrocediendo en el tiempo hasta hace algo más de un año; el anterior propietario del piso donde residen, o residían los cables, realizó unas reformas en las que debía retirarse la pared exterior para construir una terraza. Esto provocó el desprendimiento de los tendidos eléctricos, que estaban adheridos a dicha pared, y la colocación posterior de la cuerda para sujetarlo y evitar problemas por situarse cercanos al suelo. Sin embargo, ya han ocurrido algunos incidentes menores como el arranque de uno de los cables al ser rozado por un camión.
«Hace años vinieron a arreglar las aceras y pusieron un conducto subterráneo supuestamente para colocar los cables bajo tierra», explica una vecina. «Estaría bien que se retomara ese proyecto, ya que es más seguro.»
De momento, tendrán que esperar primero por la erradicación de la temible cuerda de Suecia.
La Provincia-Dlp
