Pablo Rodríguez Hernández, presidente de la Asociación de Vecinos “La Concepción” de Jinámar y destacado activista social por su labor y compromiso con el barrio afirma sobre el Mercadillo de Jinámar en su perfil de Facebook, que “muchas actividades están prohibidas este año por el COVID, pero en el mercadillo tercermundista de Jinamar, donde las ratas corren a sus anchas, los perros mean y cagan, algunos puesteros venden toda la basura que tiran en Merca Las Palmas y otros venden comidas del banco de alimentos, eso no está prohibido”.
Pablo fue más allá afirmando que «hablamos de un Mercadillo sin ningún tipo de seguridad ni higiene. Mercadillo de donde no se sabe de dónde viene lo que se vende, sin policías, sin plan de seguridad, sin un puesto de ambulancia o Cruz Roja, etc, etc».
Trayectoria
Cabe destacar que estas durísimas declaraciones no las hace cualquiera, se trata de alguien que está autorizado por su implicación con Jinámar. Desde muy joven Pablo Rodríguez se involucró en el mundo del deporte, (baloncesto, balonmano, futbol sala, atletismo) y colaboró directamente con el colegio público José Tejera, en especial con el alumnado del mismo. Jugador del desaparecido club de balonmano de Jinámar, fundador del club de futbol sala, C.C. Venancio. Se implicó directamente con la formación y calidad de vida de los jóvenes del lugar.
Ha asumido responsabilidades en distintas entidades (Patronato de fiestas, cultura y deportes La concepción y la Caña dulce de Jinámar, Asociación de Vecinos La Concepción, Forum Barranco de la Gotera, etc…)
Su compromiso real con la problemática de Jinámar es constante. Pablo Rodríguez sobre todo es buena persona, sensible con lo que acontece en su entorno.
