Los trabajadores de los medios en Canarias siempre han recibido consignas, indicaciones, presiones, consejos y adoctrinamiento de quienes en cada momento «dirigen» la información que se genera y «distribuye» en Canarias. Curiosamente, el ahora supuesto «censurado» ha sido un destacado «francotirador» a sueldo durante toda su trayectoria «profesional». En Canarias se ha cobrado por callar y por hacer ruido, por mentir y «asesinar socialmente» a quien se saliera del redil colonial. Lo han hecho TV y radios privadas previamente «untadas» y también medios públicos en donde los «comisarios políticos» han elegido a discreción donde era conveniente poner el foco, el acento y también la mordaza.
Esto de las productoras audiovisuales es, en la práctica política, lo que el chico de los recados, el juguete a distancia, la vía más limpia de hacer información sucia. ¿O es que alguien se cree el cuento de la información objetiva, veraz e independiente en una Canarias donde sólo se muestra el escaparate que desea el poder?¿Donde están los reportajes de investigación, que pongan el dedo en la llaga?.
Resulta patético que los trabajadores de la TVCa se rasguen las vestiduras ahora, porque alguien deslice en directo lo de «una orden de dirección», pero hayan mantenido silencio durante décadas sobre lo que ocurriría en muchísimos casos más de censura política o peor, de manipulación deliberada de lo que ocurría y ocurre en este archipiélago. ¿O es que no se ha hecho un uso torticero y de «medias tintas» en todo lo que tenga que ver con el poder político y económico real en Canarias?. ¿Cuantas veces nos hemos tenido que enterar por medios «extranjeros» de lo que por aquí ocurre?¿ De verdad no han participado en el mantra «vivimos del turismo»?¿De verdad nos quieren convencer de que no sabían que «sus empresas» trabajan para «el régimen»?.
¿Les suena lo de las 7 lobas?¿Les suena un tratamiento veraz sobre la estafa que supone la RiC o la Zec?¿No les suenan nombres de comisionistas, corruptos y corruptores que viven del cuento en esta colonia?¿No les suenan apellidos ilustres y de «abolengo» que defraudan a Hacienda, a la Seguridad Social, a sus trabajadores y sin embargo se los coloca como próceres o se les «protege» obviando toda referencia?.¿A qué han maquillado la realidad canaria?
Todos sabemos que las productoras que operan en Canarias, salvo muy honrosas excepciones le «bailan el agua» a CC, PP y Psoe, según sea el «cuñao» que las dirija y que la » cadena de favores» es proporcional a las de » vendettas» entre ellas. Quién quiera indagar sobre quien es quien al respecto, sólo tiene que ver quién gobernaba en cada momento, en donde y quién era su propietario/administrador. Después lo llamarán «información», pero en verdad será propaganda o sicariado según convenga.
En Canarias la información tiene dueño, tiene candados, tiene francotiradores, es negocio y poder, ordena y mando. Negarlo es pretender insultar la inteligencia del común. Y decirlo no es pretender matar al mensajero, sino decir «de quién es correo y publicista».
En Canarias, los medios y sus trabajadores no son libres, están «a las órdenes» e incluso hay muchos que están encantados de ese rol. Menos rasgarse las vestiduras y más información veraz, objetiva, valiente y democrática. Sólo entonces se ganarán el respeto.
Hijosdecanarias.com
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— fran (@fr_truji) February 27, 2024
