La primera bronca del pacto de gobierno del Ayuntamiento de Telde, al menos de forma pública, ya es una realidad. La Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de Telde (Fomentas) convocó a los presidentes de las comunidades de bloques involucrados en la segunda fase del Área de Rehabilitación Urbana (ARU) del Valle de Jinámar para exponerles este proyecto que con una inversión de algo más de 5 millones de euros reformará 480 viviendas. A la reunión que presidió la alcaldesa Carmen Hernández (NC) no fueron invitados ni Más por Telde ni el PSOE, lo que ha creado malestar en los socios de Gobierno.
Los socios critican a la alcaldesa por ´vender´ la reforma de casas en Jinámar. Alejandro Ramos y Juan Francisco Artiles tachan de desleales a los nacionalistas por «apropiarse de un proyecto de todos» – Hernández afirma que fue «una reunión de trabajo con vecinos».
