La UD Las Palmas sumó esta tarde un valioso punto en el estadio de Balaídos tras empatar a tres goles con el Celta de Vigo. Los amarillos, que jugaron 80 minutos con un hombre menos por expulsión del portero de Javi Varas, igualaron un partido que perdían 3-1.
El inicio de partido fue espectacular con dos equipos muy ofensivos. El Celta siempre llevó la iniciativa con un fútbol vistoso. En sus dos primeras aproximaciones Orellana, y Nolito estuvieron muy cerca de marcar el primer gol. Contestó Las Palmas con una clara ocasión que Roque envió a las nubes. El partido cambió en el minuto 10 con la expulsión del guardameta Javi Varas, que en su intento de detener a Iago Aspas, cometió penalti. Orellana puso el 1-0 (min. 12).
Wass, en otra rápida acción del Celta de Vigo, hizo el segundo tanto de la tarde. Con uno menos, Las Palmas lo pasó mal ante un rival que siempre miró la portería rival y que se mostró siempre convencido de su fútbol de ataque El equipo amarillo se sacudió el miedo y dio un paso hacia adelante. Sergio Araujo, en acción individual, acortó distancia en el minuto 23.
El Celta ya no fue el mismo equipo porque el equipo de Paco Herrera mejoró de medio campo hacia adelante a pesar de estar en inferioridad numérica. Jonathan Viera lo intentó desde lejos y el murmullo se apoderó de la grada. El cuadro vigués ya no llegaba tan fácil al áera amarilla poruqe eran los isleños los que ahora tenían la pelota en su poder.
Antes de llegar al descanso el Celta pudo marcar el tercero y Las Palmas el segundo. El meta Raúl Lizoain y luego el celeste Sergio enviaron la pelota a córner. Con el 2-1 para los vigueses los jugadores se marcharon a vestuarios tras un gran primer tiempo de ambos equipos.
El comienzo de la segunda mitad comenzó con un error en la zaga que el Celta aprovechó para poner el 3-1 por mediación de Nolito. Las Palmas no se rindió y en otra jugada aislada, Sergio Araujo, con la colaboración del jugador vigués Pablo Hernández que introdujo en balón en su propia portería tres el centro del argentino, estableció el 3-2 (min. 61).
El Celta estaba con mucho temor, pues Las Palmas cada vez que tenía la pelota creaba peligro. El equipo de Paco Herrera tuvo fe y en una gran jugada colectiva logró el empate por mediación de David Simón (min. 73). En los minutos finales Raúl Lizoain evitó con sus paradas que Las Palmas saliese de vacío del estadio de Balaídos. El punto logrado por los grancanarios, que marcó sus tres goles con un futbolista menos, sabe a victoria por el gran esfuerzo realizado durante todo el encuentro. Ahora esperan en el Estadio de Gran Canaria el Rayo Vallecano y el Sevilla, de manera consecutiva.
