miércoles, 15 mayo, 2024

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La Policía investiga la muerte de un hombre en Ojos de Garza

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La Policía Judicial de Telde se hizo cargo ayer de las investigaciones tras el hallazgo del cadáver de Alberto G. M.  en un charco de sangre dentro de su vivienda en Ojos de Garza. Pese a la confusión inicial, todos los indicios apuntan a que pudo tratarse de muerte natural, aunque será la autopsia la que confirme las causas. 

La alarma saltó a primera hora de la mañana de ayer cuando una de las hermanas del fallecido encontró el cuerpo sin vida dentro de la casa donde residía en solitario. Alberto G. M., de 65 años y recién jubilado, se encontraba tirado en el suelo a la entrada de la vivienda, envuelto en un charco de sangre y con signos de un golpe en la cabeza. Al parecer, llevaba al menos un día muerto.

Sin embargo, pese a que el escenario hacía prever una muerte violenta, los indicios apuntan a que la causa del fallecimiento se deba a causas naturales. Así lo han confirmado fuentes policiales que llevan el caso. Será finalmente la autopsia la que determine lo sucedido y si apareciera un nuevo dato que apunte a un homicidio o asesinato se retomaría la investigación.

El suceso tuvo lugar en un vivienda ubicada en la denominada Avenida de Los Camellos aunque tiene de nombre oficial calle Juan Ramón Jiménez. Se trata de una zona apartada, con escasos vecinos y rodeada de plantaciones e invernaderos. El hombre compartía la llamada Villa García con otros hermanos, aunque él residía en el que fuera el inmueble de sus padres, ya fallecidos hace varios años, según relataron fuentes próximas.

Hasta el lugar se trasladaron ayer varios familiares consternados por lo sucedido, especialmente al no saber si se trataba de un crimen o de una causa fortuita, incluso de una enfermedad.

Alberto G. formaba parte una de amplia familia ya que eran en total 14 hermanos. Estaba separado y por ese motivo se había trasladado a vivir hacía tiempo a la casa de los progenitores, que estaba en litigio judicial con otros familiares. Eso llevó a pensar en un primer momento que podría tratarse de una muerte violenta, que en principio ha sido descartada ya que ni siquiera la residencia ha sido precintada ni se le ha tomado declaraciones a los vecinos del entorno. La presencia de varios coches de Policía Nacional, incluidos los miembros de unidad judicial, pasó desapercibida en los alrededores al tratarse de un lugar alejado del núcleo de viviendas y de poco tránsito.

Una vez que se le realice la autopsia, el hombre será velado en el tanatorio de Las Rubiesas para su posterior entierro.

Canarias7

Florentino López Castro

Florentino López Castro

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