«La guerra de las banderas»

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Tomado del fragmento de la novela «Entre Doramas y Cuauhtémoc», de José Juan Sosa (Editorial Baile de Sol), inspirado en los incidentes que en 1945, durante la celebración del Día de la Independencia de México, tuvieron lugar en Ciudad  de México entre los estudiantes de los colegios Angla y Cristóbal Colón enfrentados a los del Luis Vive. Con  motivo de la celebración de tal efeméride, los primeros, de ideología monárquica, engalanaron su autobuses escolares con la bandera española bicolor, entretanto que los segundos, de ideología republicana, lo hicieron con la tricolor de la República. Ello ocasionó serios enfrentamientos entre los alumnos  y algunos profesores de los colegios implicados.

Así le hablaba el profesor  Millares Carló, exiliado en México,  al joven bibliotecario grancanario del COLMEX, refiriéndose  a los incidentes antes mencionados, dados a conocer como  la  Guerra de las Banderas:

«…La guerra de las banderas, los nacionales enfrentados a los republicanos. Pero esta guerra, igual que la otra, son guerras vacías, vanas, donde las banderas son parecidas a los globos de colores, que por fuera son vistosos, pero dentro… Dentro solo llevan gases, que se diluyen en la nada cuando se rompen los globos…»

«…Las banderas se convierten en armas muy peligrosas cuando, en vez de representar un ideal o un sentimiento compartido de unidad, se convierten en representantes de ideas bastardas o de dogmatismos ajenos a los ideales democráticos. Una bandera se convierte en maldita cuando no representa la heterogeneidad de un país en cuanto a culturas, sentimientos e ideologías…»

Igual que sucedió hace algo más de medio siglo entre los españoles residentes en México, estos días la utilización de las banderas se han convertido en armas muy peligrosas, puestas al servicio de una guerra entre dogmatismos rígidos y contaminados por  una historia escrita al dictado de los intereses e ideologías de algunos, y que ha propiciado una terrible fractura en la sociedad catalana, que, me temo,  tardará mucho tiempo en recuperarse.

José Juan Sosa Rodríguez

Florentino López Castro

Florentino López Castro

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