¿De verdad que Coalición Canaria no tiene nada mejor que ofrecernos?

¿De verdad que Coalición Canaria no tiene nada mejor que ofrecernos? ¿Cómo es posible que el vicepresidente del Gobierno de Canarias, el teldense Pablo Rodríguez, continúe avergonzando de esta manera a todos sus paisanos con la condescendencia del presidente, Fernando Clavijo y todo su Ejecutivo?.

No es serio ni tolerable, que mientras miles de canarios sufren desempleo, exclusión social, falta de infraestructuras y conexiones viales en pésimas condiciones, Pablo Rodríguez, representante político al más alto nivel de la Comunidad, celebre la llegada de Juego de Tronos a Canarias caracterizado como un personaje subiendo el mismo a las redes un montaje como un actor de la serie de George R.R. Martin. Y no es la primera vez, es reincidente en este tipo de comportamientos infantiles, impropios de su cargo.

Hay que exigir rigor, seriedad, sentido común, ética y respeto a Coalición Canaria. Ya el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso (también de CC), señaló sobre Pablo, que le falta “capacidad técnica” para realizar su gestión, evidentemente también una madurez de la que adolece. Pero ya no hay que esperar nada bueno de un chico que ha demostrado que no da para más, hay que pedir explicaciones a Coalición Canaria y al presidente Clavijo, porque si esta es la mejor demostración de la capacidad política y programa de actuación que tienen para Canarias, nos sentiremos afortunados de tener unas elecciones en mayo para mandarlos a la guardería y dejar paso a políticos de verdad.

Es evidente que tan responsable es quien se toma como un juego los cargos que ocupa (también es consejero de Obras Públicas), como el que permite este insulto a la inteligencia, denigrando la imagen del político moderno, preparado, serio y resolutivo, hasta convertirlo en algo vulgar, soez y grotesco. Los ciudadanos tienen que recordar que estos políticos de Coalición Canaria se dedican a jugar a los cómics y viñetas cobrando más de 3.000 euros al mes, mientras los Servicios Sociales de la Comunidad están desbordados, la tasa de paro en aumento y las oportunidades laborales lejos de casa. Es normal que nos sigan viendo con taparrabos en determinados lugares de España.