«CARTA A MI PADRE, GONZALO OTERO RUIZ»

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Como escribe uno algo sobre ti, si aún te sentimos aquí, con tus bromas, tu cariño, tu carácter… si tuviera que recapitular mi vida y nuestra vida juntos lo haría desde el humor, como siempre fue. Desde pequeños fuimos educados desde ese doble hogar gallego y canario que llevabas tan en tu sangre y tus raíces, historias interminables de abuelo, de la guerra y de Galicia. Hazañas que te llenaban la boca y los ojos al contarlas y que a nosotros nos dejaban siempre con ganas de más.
 
Cada navidad, te encantaba dar golpes en la azotea y hacernos creer que el mismo Santa Claus o Los Reyes magos estaban arriba, te lo creías tanto que hasta miedo les teníamos!! Nos leías cuentos, nos metías siempre en un mundo de fantasías.
 
Cada cumpleaños, cada fiesta, eras el más entregado junto a mamá. Nos educaste en la constancia y la perseverancia. Tus valores, tu educación y tu grandísimo corazón dejaron huella en nosotros y en quienes somos hoy en día.
 
Crecimos y siempre estuviste ahí… tus consejos acabaron siempre ayudando, tus “ acuérdate de lo que te digo “ acabaron siempre ocurriendo, fuiste un gran guía, el mejor. Un ejemplo y un gran ser humano.
 
Fuiste un hombre muy inteligente, tu mente maravillosa, brillante.. y muy difícil de discutir contigo o refutarte algo hasta tu marcha no dejaste de leer, de estudiar, de aprender. Eras la persona más inteligente que conocimos.
Justo, valiente, de frente siempre pero con un corazón, tan grande que estabas para el que fuera cuando fuera.
Dejaste esa huella que pude ver hoy con tantas tantas personas que te amaron en vida. Es tan bonito ver y saber que mi padre ayudó a tantas personas, saber que vengo de ti me enorgullece enormemente.
 
Dejaste a tres personas a las que hoy el alma se les rompió un poquito, porque Martin, Mamá y yo desde hoy aunque luchemos por seguir, nunca seremos los mismos que fuimos contigo, pero también se.. que siempre estarás con nosotros.
 
Siempre me preguntan “de dónde saco mi humor” mis bromas.. mis locuras… de quien iba a ser sino de ti… te llevo en la sangre y en cada broma que hago, estas y estuviste siempre tu papá, soy tu reflejo.
Hasta el don de la música te lo debo a ti, familia de escritores, pintores y intérpretes del arte y la sensibilidad. GRACIAS, me lo diste todo y tu eras mi todo con mamá y lo serán siempre. Ojalá te lo hubiera dicho muchas veces más.
 
Siempre te recordaré, siempre te llevaré conmigo, siempre te cantaré. Cuidaré de nuestra familia, haré todo por y para ustedes con todo el amor. Te prometo que lucharé tan fuerte que allá arriba donde estés con el resto de los tíos y la familia llegará la alegría. Te quiero, te admiro, te amo y te extraño y extrañaré siempre. Te voy a llevar en cada suspiro del resto de mi vida. Ojalá haberte dicho las suficientes veces lo tanto que te quiero, perdón las veces que lo debí hacer.. y las gracias por tanto.
 
Ahora te llevo en mi pecho y en mi ser. te voy a echar mucho mucho mucho de menos. Hasta siempre papi. Descansa en paz. Un esposo, padre, amigo, abogado y ser humano ejemplar.
 
(*) José Otero, hijo del prestigioso abogado Gonzalo Otero Ruiz, tristemente desaparecido en la jornada del pasado miércoles 8 de diciembre de 2021 
Florentino López Castro

Florentino López Castro

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