Durante los últimos tres años, Telde al igual que la mayoría de las grandes ciudades ha decidido centrar el alumbrado navideño en el casco, lo que se han convertido en un estímulo económico y social en fechas tan especiales como la Navidad.
Está ya más que estudiado que los vecinos se trasladan desde sus barrios a la zona comercial de Telde, por lo que invertir en hacer un gran espectáculo navideños es mucho más atractivo, que plantar seis bombillos en la entrada de algunos barrios.
Hay que decir en honor a la verdad, que Telde ha dado en estos últimos tres años un salto cuantitativo en el alumbrado navideño, que ya es referente en todas aquellas publicaciones que recomiendan visitar la decoración de Navidad
Lejos de alabar que algo funcione bien en este grupo de gobierno, los “manipuladores de turno” siguen fomentando el descontento ficticio de la falta de alumbrado en los barrios, que antes no existía tampoco salvo alguna “ solitaria zambomba” en alguna calle perdida.
Telde inauguró una Navidad con una ruta de diez paradas en distintos puntos de la ciudad, 290 motivos festivos y 166 figuras, en definitiva, las luces son mucho más que decoración: son un evento cultural, un dinamizador económico y, sobre todo, una cita ineludible para vivir la magia de las fiestas en las principales ciudades españolas. Los ciudadanos disfrutan de los paseos a estos centros de la ciudad viendo las luces navideñas.
Hay que destacar el inmenso trabajo desarrollado por la concejalía de Alumbrado que dirige, Juan Francisco Artiles, que tras el éxito de las últimas ediciones, ha renovado y ampliado la decoración navideña de este año, ofreciendo una Navidad única, destacada que es el orgullo de Telde y de todos sus ciudadanos.
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