Despierta ya, Jinamero,
despierta ya de tu sueño
y veras que no eres dueño
ni de tu propio trasero.
Trabajas de Enero a Enero
para ganarte el sustento
y cuando ya estas contento,
creyendo que lo has logrado,
llega alguien por lo ahorrado
que manda el ayuntamiento.
Te valoran, los corrales,
te miden la gallania
y ya vendrán otro día
por si tienes animales.
Y aunque te fijan los males
y vivas de tu pension,
te dicen que la nación
precisa de tu dinero
y debes ser el primero
en pagar contribución.
Te catastran la casita
que hiciste con tu sudor
y te aplican el valor
de una mansión sibarita.
Porque dicen que e lque habita
bajo de su propio techo
ha de pagar por derecho
el lujo de sus paredes;
por eso les digo a ustedes
es mejor no haberlas hecho.
Pablo Rodríguez, presidente de la Asociación de Vecinos La Concepción de Jinámar