UN MENOR DE 12 AÑOS ES AGREDIDO POR UN ADULTO A LA SALIDA DE SU INSTITUTO EN TELDE

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Un menor de 12 años sufrió el martes una agresión por parte de un hombre, mayor de edad y vecino de Telde, a la salida del instituto. El ataque fue sin mediar palabra, tal y como consta en la denuncia a la que ha tenido acceso LA PROVINCIA/Diario de Las Palmas, y como relata la madre de la víctima. El niño tiene una erosión en la mejilla derecha y en la zona frontal de la cara, y un edema en el párpado superior del ojo derecho a consecuencia de un puñetazo. 

El suceso ocurrió cuando el afectado salió del instituto José Frugoni Pérez a las 14 horas y se dirigió hacia la calle Carretera de Gando, en la zona de Lomo Cementerio, para coger la guagua que lo llevaría a su domicilio. En un paso de peatones, escuchó unos pasos tras él y sintió a una persona, con fuerte olor a alcohol, a su espalda, muy cerca. Decidió darse la vuelta para ver de quién se trataba.

«Él se dio la vuelta al notar detrás una presencia y ver una sombra. No le dijo nada. Inmediatamente, al girarse, el hombre le dio un puñetazo. Fue sin mediar palabra. No tiene explicación», cuenta a este diario E. M., la madre: «No lo conoce de nada, no lo conocemos». 

Luego, el agresor, lo agarró del cuello y lo arrastró hacia un muro contra el que le rozó la cara. Fruto de eso es la erosión que tiene en la mejilla y en la parte superior del rostro. El niño tiene también el párpado derecho inflamado a consecuencia del puñetazo.

Otros estudiantes que esperaban la guagua vieron la agresión y gritaron al atacante, que se fue corriendo hacia la zona de La Barranquera, donde supuestamente vive. El agresor es un hombre de unos 60 años, alto, delgado y con barba que suele ir disfrazado. La Policía Nacional, ante la que los padres del menor han denunciado la agresión, tiene localizado al individuo. No se descarta que sea un hombre que sufre alguna enfermedady que ha tenido más encontronazos y episodios violentos en la zona, donde lo conocen como Paquillo.

Capucha y una botella

En el momento del ataque a este niño, el investigado tenía una herida sangrante en el rostro, llevaba una capucha puesta y portaba en sus manos una botella. «Los otros niños que lo vieron corrieron detrás de él, pero no lo alcanzaron. Luego lo vieron regresando a la zona donde pegó a mi hijo. Estaban subiéndose a la guagua», continúa la madre.

«Cuando me cuenta lo que ha pasado yo le insisto mucho en si le dijo algo, porque no puedo comprender cómo un señor ataca a un niño y más sin mediar palabra. No ocurrió nada que pudiera desencadenar la agresión, no le dijo nada, ni siquiera lo miró porque estaba de espaldas. Y eso lo hace todo más peligroso porque puede agredir a cualquiera en cualquier momento», critica la progenitora del menor, sin entender cómo el agresor puede continuar libre.

La víctima ha identificado ante la Policía Nacional a su agresor que, al parecer, ya habría increpado a otros menores del instituto, por el que suele rondar. «Los niños tienen miedo porque es un adulto y ellos son eso, niños», concluye la progenitora, que reclama que se tomen medidas para que el suceso no se repita.

La Provincia-Dlp (Carlota Barcala)

Florentino López Castro

Florentino López Castro

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