Los usuarios del centro de día de mayores de San Gregorio tendrán que buscarse otro sitio para celebrar el baile de Fin de Año. Ni el Gobierno de Canarias ni el Ayuntamiento de Telde tienen potestad para organizar un evento que desde el Ejecutivo central se prohíbe y acarrea sanciones a los responsables regionales de Políticas Sociales por parte del Imserso (Instituto de Mayores y Servicios Sociales) porque incumplirían la actual normativa y reglamentos de funcionamiento y de actividades programadas en los centros de mayores.
Una situación que se torna en un conflicto en ciernes por parte de los mayores teldenses, ya que la coordinadora de relaciones de este recinto, Pino González, anunció ayer que una representación de sus usuarios han previsto celebrar mañana una concentración ante las Casas Consistoriales de San Juan durante el pleno ordinario de noviembre, al que también anuncian su asistencia en el salón. González defiende que «los mayores podamos organizar el baile de Fin de Año en nuestro centro y no tener que irnos a otros municipios u otros locales y nos han dicho en el Ayuntamiento que el Gobierno de Canarias no quiere porque prohíbe la venta de bebidas y que no pueden dar el permiso».
Asimismo, señaló que no se «trata solo de la celebración del baile porque también es un día donde los mayores quieren estar con personas de su edad y sus hijos los traen aquí». No descartan medidas de presión como las realizadas con las obras del centro, «donde sacamos a los mayores a bailar en la calle o a jugar a las cartas y queremos que se nos acepte lo que pedimos porque somos el centro de mayores con más usuarios de Canarias, con casi 6.000». De paso, González indicó que pese a las obras de mejora, «el día que diluvió en noviembre se mojaron cables y se tuvo que desconectar la corriente en algunos sitios, pero siguen sin arreglarse», afirmó mientras señalaba al techo.
La directora general de Políticas Sociales del Ejecutivo regional, Reyes Henríquez, aseguró que «en ningún centro de mayores del Gobierno de Canarias se autorizan los bailes de Fin de Año porque para organizarlos hay tener personal, póliza de seguridad, personal de vigilancia y porque en los reglamentos de los centros de mayores se establece la prohibición de la venta de bebidas alcohólicas. Nunca se han celebrado estos bailes ni se pueden autorizar porque lo prohíbe la normativa del Imserso».
Henríquez argumentó ayer que «lo normal es que se organice una merienda o algún tipo de brindis el día anterior a la noche de Fin de Año, con una orquesta o un dj que tocan un par de horas por la tarde, dentro del horario normal de funcionamiento, como una actividad más del centro».
La directora general recordó que si algún particular quiere organizar algún baile de Fin de Año con los mayores puede hacerlo en algún local y el Ayuntamiento también, si lo piden los usuarios, puede buscar algún lugar donde celebrarlo, pero en el centro de mayores no puede «porque en su encomienda de gestión se establece que debe cumplir el reglamento, que los prohíbe».
Diego Ojeda, concejal de Servicios Sociales, declaró ayer que «nosotros nos reunimos con la junta de coordinación del centro y nos plantearon la posibilidad de organizar este evento y les ofrecimos toda nuestra colaboración al concesionario, pero no tenemos personal ni medios para elaborar un plan de seguridad».
Ojeda alegó que «nosotros mostramos nuestra predisposición porque estamos de acuerdo en apoyar este tipo de eventos, ya que con el concesionario de la cafetería hemos mantenido reuniones y le hemos expresado que deben cumplirse esas normas, nada de bebidas alcohólicas, como mucho un pequeño brindis».
Además, el edil de Servicios Sociales recordó que «los martes y los jueves se organizan bailes en el centro de mayores, donde el concesionario se encarga de la póliza de responsabilidad civil, la seguridad y los demás requisitos, pero no depende de nosotros dar el permiso».
La Provincia-Dlp
