“Las lorzas del Carnaval”

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Estas islas, enclave bíblico de la belleza femenina a derivado con el tiempo a una sustentación de la clásica XXXLL o como les llaman ahora, las nenas de las tallas grandes. Si, esas que, para hacerse unas bragas, necesitan tres sacos de azúcar de Cuba.

Que conste muy claro, que este artículo no esta escrito con tintes ofensivos, faltaría más. Yo aprecio y quiero a muchas mujeres, por lo tanto me preocupa su salud y a veces, es mejor decir las cosas claras, sin tapujos, pues doliendo, despiertan las mentes y llegáis a comprender, que esas lorzas son muy malas para vuestra salud.

Realmente hay que reconocerles, que la vergüenza personal es inexistente en ellas. Las veces que se agachan y enseñan la parte posterior de un tanga. Horroroso, solo hay que imaginarse la situación y estallas interiormente. Te preguntas, ¿cuántos metros de elástico hacen falta para esa circunferencia?

Si por un casual te da por ir a ver alguna actuación, de eso que les ha dado por llamar “MURGAS”, puedes observar una imaginativa secuencia de como se alimenta una “murgera”, a base de “asaderos”, que le entra bien a la vista de sus imágenes.

Una colección de “TALLAS GRANDES”, que seguirán años y años engordando, manteniendo la descendencia del celebre “MICHELÍN”. Yo a veces, me las imagino con aquellos patitos blancos de goma, de antaño, rodeando esos cuerpos, que al final, cualquier ola les volteaba y había que correr para ponerla derecha y que no se ahogaran.

Yo, personalmente, puedo estar equivocado, pero esas lorzas son la respuesta a una predisposición de la mujer, para solventar sus problemas, lo que le lleva a engullir todo, se tiran el día comiendo, como si ello les fuera a solventar, lo que ellas mismas han provocado.

Esas masas, que al caminar van rascándose muslo con muslo, donde cada muslo equivale a la rueda posterior de un tractor, con unas masas a flor de piel que ellas denominan, piel de naranja y yo denomino sandias de verano, por su volumen. Esas cosa os hacen daño y tenéis que comprenderlo.

Aún recuerdo a aquellas extranjeras para todos los gustos, donde encontrábamos a las inglesas (mujeres sucias), las alemanas (mujeres peludas) y las suecas. ¡Hay! las suecas, quien las ha visto y quien las ve hoy en día, cuando han elegido, para representarlas en el concurso Miss Universo, a una inmigrante negra del Sudan, fea de cojones.

Las “murgas femeninas”, son el paraíso para esas gorditas, donde piensan que, disfrazándose de cualquier cosa, ya están bonitas, hay que joderse, pero ni así. Por mucho que griten, dicen que cantan, pues será el cantar y la danza de la lluvia a la vista del tiempo que estamos padeciendo estos días. Y que conste, que también existen “otros murgueros”, que las lorzas se les salen por los bajos de sus disfraces. Que la IGUALDAD, tanto DA IGUAL, lo digo por la equiparación de sexos.

Cuando una panda de separadas-divorciadas, sabrá Dios que razones existen para ello, se esconde detrás de las grasas, es solo por un motivo sencillo, la falta de personalidad. Ahora se han puesto de moda lo del #Me Too, resultando que todas se abrieron de patas y cuarenta años después se dedican a denunciar lo que supieron callar por dinero.

Está muy claro, que siete centímetros son suficientes para complacer a algunas mujeres, da lo mismo y no importa que sea Visa o MasterCar.

Luego tenemos a las nuevas murgueras, gorditas también, esas que van con tambores y silbatos, tocando el mismo ritmo, durante años y años, sin conseguir nada mas que el ruido y el estruendo, que por mucho ejercicio tamboril que hagan, no consiguen con ello, rebajar un puñetero kilo. Y lo bueno es el paso que marcan con las patas abiertas, parecen un “paso de semana santa.

Y ahora viene lo peor, donde unos políticos y unas organizaciones que dicen defender a los menores permiten que durante el Carnaval en muchísimas poblaciones, esos menores salgan destapaditos, para con ello posibilitar a que “algunos pederastas” se jarten de hacer fotos a tus hijos.

Sí, eso solo hay que plantarse en esos festivales y ver como lo que digo, está ocurriendo. ¿No pensarán ustedes, que la cantidad de fotos obtenidas cuando actúan las XXXLL, es proporcional, a cuando actúan menores?. Pasen y vean.

Doramas

Florentino López Castro

Florentino López Castro

2 comentarios en «“Las lorzas del Carnaval”»

  1. Veamos, ¿no le ha gustado a usted?, pues solo digo la verdad y alguien dijo: «LA VERDAD OS HARÁ LIBRES».
    La que se pica es debido a que ajos come o mejor que come en muchos asaderos y al final, pues que tengo razón yo.

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