La primicia avanzada por ONDA GUANCHE ayer jueves 12 de mayo, de la que se hicieron eco prestigiosos medios de comunicación, locales, insulares y regionales, donde dábamos cuenta de la situación de María Dolores Aguiar Hernández, una madre y su hijo en riesgo de exclusión social abandonados por Servicios Sociales de Telde que han mandado a un centro de toxicómanos de Vecindario, ha provocado una reacción inmediata de la alcaldesa de Telde, Carmen Hernández.
Hernández, ha querido apagar la hoguera de su pésima gestión en Servicios Sociales apareciendo hoy en el periódico CANARIAS7 (a remolque de ONDA GUANCHE), para anunciar que “el Ayuntamiento, aun y pese a que no tiene competencias en Vivienda, está intentando todo lo que está en sus manos para ayudar a María Dolores, la joven de 27 años que vive con su hijo menor (9 años) en una vivienda alquilada en la calle de Santo Domingo, en el sector de El Cascajo, que el próximo día 19 de mayo será desahuciada por no abonar la renta al propietario del inmueble, tal y como adelantó ONDA GUANCHE.
La primera edila justificó afirmando que “en la normativa en vigor, cuando una vivienda pública se queda libre, hay que sortearla entre los solicitantes de casas, pero que hay un artículo que permite darla a casos excepcionales, siempre que se justifiquen con un informe social”.
Hernández aseguró que, según los datos del Consistorio, en Telde hay 75 familias con un problema grave de vivienda, pero que de esas 75, 15, entre las que están María Dolores y su hijo, se hayan en situación límite. «No nos consta que en Telde se haya quedado libre una vivienda de promoción pública, pero nosotros ya nos hemos adelantado y le hemos dicho al Instituto Canario de Vivienda que en Telde hay 15 que pueden acogerse a la excepcionalidad”.
