JINÁMAR: URBANISMO, URBANIDAD Y MAFIA

La ciencia que se encarga de organizar-ordenar las ciudades desde el Imperio Romano, lo definimos Urbanismo. Su evolución nos ha llevado a que otras ramas del conocimiento (no solo arquitectos y delineantes) intervengan: Sociología, psicología, economía, etc. La urbanidad tiene que ver más con nuestro comportamiento con los demás, con nuestra relación con el entorno lo que vienen a ser las buenas maneras para una convivencia armónica y agradable.

Mafia es una clase especial dedicada al crimen organizado donde se mezclan delincuentes habituales, funcionarios, políticos, policías corruptos, fiscales «despistados» y hasta jueces sin escrúpulos ni principios.

Mantengo muy vivo el recuerdo de un pasaje de mi vida en el que me tocó cubrir para el periódico La Provincia la noticia: «Cesar Manrique visita El Valle de Jinámar». Intentará darle un «lavado de cara a un polígono social deprimido»  ¡Ni entró! espetó. Mandó a parar el vehículo que lo trasladaba desde el aeropuerto en la autopista Las Palmas – Gando, se bajó del coche y dijo: «Yo ahí ni entro….sinvergüenzas, hijos de puta, cabroneesss. ¿Cómo pueden hacerle tanto daño a Canarias?».

Ante la insistencia de los redactores que estábamos cubriendo la noticia nos dijo: » ¡Que no, que ni entro a ver esa bazofia urbanística». Que la tiren y después que me llamen… ¡vámonos chofer! y desapareció sin más. Cesar se nos murió y la «mafia» responsable del atentado urbanístico no solo ha sobrevivido sino que sigue manteniendo en poder, chapuceándose y «comisionándose en pequeños planes urbanísticos en la zona (polígono Ajimar, Centro Comercial Las Terrazas, Centro Comercial El Mirador, Lid, etc.

Y  en Telde  como nadie les «hace sombra» (aunque debieran estar a la sombra de un penal) se han envalentonado y siguen creciendo como la mejor de las organizaciones mafiosas conocidas. Esta MAFIA encarnada en el Grupo de Gobierno del ayuntamiento, lo mediatiza todo, controla cualquier movimiento social, maneja los hilos de la opinión publicada y la somete a sus intereses. Es la dictadura de Don Dinero, la razón por la fuerza; eso sí, con el cinismo como herramienta básica de argumentación: «Si los malos son ellos…nosotros somos los buenos de la película, hacemos el bien común, es nuestro objetivo».

Las propuestas que la vecindad de Jinámar ha hecho al Ayuntamiento de Telde «potencia administradora de los 90 millones de € adjudicados » del 70% de la zona han sido múltiples y variadas…cientos, ¡miles! pero normalmente no les interesan porque la mamandurria, la comisión, el bissnes no existe.

Solo por citar alguna: Recuperación de La Noria, Rehabilitación tanto de bloques de vivienda así como de carreteras a cargo de los vecinos, creación de varios Huertos Urbanos, Puesta en marcha de un equipo para recuperar las playas, Rehabilitación y puesta en valor de la Lotus Kunkeli, Museo etnográfico, recuperación del Parque de Las Mil Palmeras y la Casa de La Condesa, Obtención mediante sistemas novedosos de energía en varios aspectos y hasta la creación de una ciudad subterránea para acabar con la bazofia urbanística establecida. Quedan muchas como puede ser la creación de un nuevo Centro de Salud apropiado o un sistema de transporte actualizado, pero como no hay comisión, no hay trato.

Germán Ramos Ramos, colaborador de ONDA GUANCHE y líder vecinal de Jinámar