«¡Helado, al rico helado!»

Comparte esto:

No se puede llegar a la política despotricando de los “caciques”, de los “intermediarios” y de los “conquistadores godos”, para una vez escalada la sima, repetir la misma historia y eso es lo que ocurre en esta isla, de las demás, por mi como si se hunden, que hablen por ellas sus habitantes. Veamos…

Mafia es un término que se refiere a una clase especial de delincuencia  organizada, independientemente de su origen o lugar de acción. En su origen era una confederación dedicada a la protección y el ejercicio “autónomo” de la ley (justicia vigilante) y, más adelante, en delincuencia organizada. Sus miembros se denominaban a sí mismos «mafiosos», es decir, ‘hombres de honor’. Los miembros de los distintos clanes mafiosos emplean una serie de «códigos de honor», inviolables, de los cuales el más conocido es la omertá o ley del silencio. Aquí se le conoce por el dicho “EL QUE SE MUEVA NO SALE EN LA FOTO”.

En estos momentos escribo desde el jardín y observo un trozo de terreno de mi propiedad, de aproximadamente un metro cuadrado, que esta sin plantar. Pienso, luego existo, ¿Y SI SE LO OFREZCO AL CABILDO POR UNOS EUROS, para que planten un pino?. Dirán ustedes que eso es mucha caradura, pero es la realidad. Si han comprado unos riscos donde después de miles de años, ni la naturaleza los ha utilizado para una simple higuera, tendré yo el mismo derecho a vender mi metro cuadrado, donde la naturaleza acepta un pino.

Claro que para ello me falta un detalle y es sencillamente que no soy de LA FAMILIA. Ahí es donde se mete el dedo en el ojo, LA FAMILIA, que no quiere decir solo la consanguínea, que esa huele mucho de lejos, hablamos de  LA FAMILIA POLÍTICA, nunca mejor dicho. César reprobó a Pompeya, porque no basta que la mujer del César sea honesta, también tiene que parecerlo.

Esta gentuza, por llamarlos de alguna forma, se deben creer, que en esta isla ya no cabe un tonto más… Y, como para ellos somos todos tontos, pues a vacilarnos y vaciarnos los bolsillos. Nos quitan hasta las herencias de nuestros padres, a base de impuestos sobre impuestos, de unas propiedades hartas de pagar toda la vida. Y, si la herencia es un risco de mierda y tu estás “bautizado”, te la compran al precio que tu quieras.

Rodríguez dice que no ha tenido nada que ver en la compra de suelo rústico a su familia. Ha asegurado que no ha tenido “nada que ver”. Faltaría más, aunque de lo contrario, les daría igual. Aquí nunca pasa nada. Y nos suelta: “No he tenido, por supuesto, nada que ver en ninguna fase de ese proceso realizado por los servicios técnicos de la Administración insular. Un procedimiento que confío haya cumplido con la normativa vigente”. “Se trata de suelo rústico que el Cabildo de Gran Canaria adquiere, como hacen otras corporaciones insulares de las islas, con el fin de proceder a su reforestación y a la conservación medioambiental de la isla”. Vale mi niño, aceptamos a NC, como animal de compañía, no nos queda más remedio. Y añade, “Tal y como ha explicado el Cabildo”, ese suelo ha sido adquirido “mediante un procedimiento de convocatoria pública reglado”.

El presidente del Cabildo, Antonio Morales (NC), ha defendido, que la decisión de su gobierno de comprar por cuatro millones de euros fincas en el macizo de Amurga a la familia del líder de su partido, Román Rodríguez, respondió a criterio técnicos y que él no sabía de quién eran parientes sus propietarios. Pero usar dinero de los grancanarios en comprar fincas de conocidos, es un robo a los isleños. No se puede hablar de transparencia y luego hacer jugadas extrañas, en el último minuto.

El “DIVINO MORALES”, defiende la adquisición de estos terrenos destinados a la repoblación forestal y dice que atiende a criterios técnicos. Además se busca un atajo para culpar al PP, recordando que el inicio del expediente se remonta a 2014, cuando el PP gobernaba la institución. La cobardía política es muy grande. La adquisición de esas tres parcelas, situadas en el Macizo de Amurga, en los municipios de San Bartolomé y Santa Lucía de Tirajana, fue aprobada el pasado 28 de diciembre, en un consejo de gobierno del Cabildo extraordinario y urgente. No se informó de ello a los grupos de la oposición, ni en las comisiones ni en el Pleno. Eso ya delata el secretismo.

Pedro Justo, consejero insular de Hacienda y Presidencia, explicó que “la aprobación de la compra de esas tres fincas se realizó con urgencia porque había que hacerlo antes de finalizar el año. En caso contrario, los 4,06 millones de euros no se hubiesen podido consignar en los presupuestos del año 2018”. En pocas palabras que había de gastarlos “si o si” y justamente ese era el dinero que había de gastarse. ¿?

Los Técnicos del Servicio de Medio Ambiente defendieron la operación porque consideran que la parte alta del Macizo de Amurga es una de zonas de la Isla con mayor potencial para la reforestación, pues allí existían tres zonas de vegetación autóctona que ha desaparecido: un pinar en lo alto, un sabinal a la mitad y un cardonal en la parte baja. Fantástico, la naturaleza renuncia y los técnicos compran para plantar. La pregunta sería, ¿van a ir los técnicos a regar esa reforestación?.

Y ahora, los socialistas dicen de negociar. ¿Negociar, el que, un presunto delito?, por defecto de forma. Yo no creo en las casualidades y menos en política. Pero como siempre, ahora la culpa es de una funcionaria, que según ellos, pudo no motivar con un informe técnico la justificación del consejo que se acometió 10 minutos antes del pleno ordinario del mes, el 28 de Diciembre. Dicen ellos, los de siempre, que el consejo fue convocado en un plazo no explicado aún, inferior a 45 minutos para acelerar el acuerdo. Y, casualidades de la política, todos ellos estaban allí para aprobarlo.

La acción del PSOE en días precedentes “dicen” ha resultado decisiva, para “rebajar la tensión y la alarma social” de un caso que ya ha entrado en los tribunales. “Por posibles vicios administrativos”. Que sí, y la sociedad estaba en Belén con los pastores o en Amurga plantando pinos. No, señores del PSOE, esto no es Andalucía, ni estos son los ERE´s, aquí se mojan o no se mojan, luego no vengan pidiendo votos. Al final veremos como con una consejería para el partido, que ha llevado esto al juzgado, todo arreglado.

Tiempo al tiempo. ¿Donde tengo que ofertar mi metro cuadrado?, advirtiendo que “NO SOY DE LA FAMILIA”. Lo dicho, me voy a Amurga a plantar un pino, pero “UN PINO”.

Doramas

Florentino López Castro

Florentino López Castro

Deja un comentario