El FC Barcelona salió desacertado en ataque. Fallaron hasta tres triples casi consecutivos después de buenas labores en los bloqueos directos. Sus opciones de tiro aumentaban ante la pasividad en el rebote de los amarillos, que concedieron cuatro rechaces en su propio aro en los compases iniciales.
CONTROL SOSEGADO DEL BARÇA
Eso es lo que evitó que el Herbalife Gran Canaria aprovechara su mejor intensidad en las transiciones al inicio del choque. Después de estar por delante hasta en dos ocasiones, Doellman se erigió como líder blaugrana para disparar a los suyos (4-9, minuto 5).
La entrada de Sasu Salin dio mayor energía a los amarillos, que seguían haciendo una buena defensa e intentaban competir en intensidad con el poderío azulgrana. Así, el finés anotó una bomba y luego robó un balón que acabaría dentro tras rebote ofensivo de Paulí. Parcial rápido de 6-2 y los claretianos de nuevo muy metidos (10-11, minuto 8).
Oliver de tres y luego Kendall pusieron la igualada antes del intermedio, pero Tomic sobre la bocina dejó dos arriba a los azulgrana al término del primer acto (15-17).
En el inicio del segundo cuarto el Herbalife Gran Canaria logró ponerse de nuevo por delante en el electrónico. El banquillo de Aíto García Reneses seguía funcionando y era ahora Ian O’Leary quien se convertía en protagonista. Kuric, tras asistencia del californiano, adelantaba a los amarillos.
Pero la ventaja fue efímera. El buen trabajo en los bloqueos indirectos del FC Barcelona y la gran lectura de juego de Marcelinho Huertas, una vez más clave ante los grancanarios, mantenían por delante a los barceloneses. El base carioca anotó siete puntos de manera casi consecutiva para lanzar a los suyos (21-28, minuto 15) ante un Herbalife Gran Canaria que no conseguía anotar con comodidad.
LA CHISPA DE BELLAS
Sin embargo, Huertas volvió a encontrarse con su némesis: Tomás Bellas. La relación tensa que une a ambos ha estado marcada por diversos encontronazos durante la carrera de ambos, y en el día de hoy la afición claretiana vivió otra entrega. Los árbitros, correctos en el devenir del choque, supieron mediar sin que llegara la sangre al río. Pero lo cierto es que el Herbalife Gran Canaria siguió remando a contracorriente, sin despegarse demasiado en el electrónico.
Un increíble mate a una mano de Satoransky por encima de Tavares se convertía en un 2+1, y luego Pleiss con un gancho seguía abriendo la brecha nuevamente a favor de los visitantes. El Barcelona, sin estar especialmente acertado, conseguía enfilar el túnel de vestuarios con seis puntos de ventaja (36-42).
La exigencia no estaba siendo máxima, pero la afición amarilla apretó para que así lo fuera. En la reanudación los de Aíto García Reneses mejoraron prestaciones y jugaron sus mejores minutos hasta el momento. Así, con un parcial de 8-3 liderado por Bellas lograban situarse a tan solo un punto (44-45, minuto 23).
Al Barça se le atragantaba la defensa isleña. Edwin Jackson, que contó con muchos minutos, estuvo especialmente desacertado, y los azulgranas se encomendaban al rebote ofensivo. Uno, otro, y otro más. La hemorragia parecía imparable y el buen trabajo ofensivo y defensivo de los amarillos parecía morirse por ese enorme agujero en la zona.
Así, el equipo catalán conseguía mantenerse en todo momento por arriba, y llegó hasta los ocho de ventaja (49-57, minuto 29) después de dos tiros libres de Hezonja. Un arreón final antes de que acabara el cuarto permitió a los amarillos seguir soñando con el triunfo (53-57).
DON ALBERT OLIVER AL SERVICIO
Y si el tercer período acabó con un soberano tapón de O’Leary sobre Doellman, el último arrancó con Albert Oliver dominando. Pero dominando de verdad. No dominó como se suele decir hoy en día. Dominó a su antojo, a su ritmo, a su merced. El base catalán metió un triple para poner a uno a su equipo, y luego otro para darle la delantera.
Respondió Huertas de dos, y Oliver clavó su tercer triple del último cuarto. Tomic consiguió recortar distancias en la pintura… Y Albert Oliver clavó el cuarto desde más allá de 6,75 (65-61, minuto 34).
El base dinamitó por completo el choque. Xavi Pascual intentó por todos los medios corregir el rumbo del partido con tiempos muertos, con cambios defensivos. Pero no hubo manera. Después de un intercambio de errores, Huertas anotaba un triple que acercaba a uno a los suyos… y acto seguido respondía Bellas. El duelo siguió candente los siguientes minutos, con una suspensión de dos de Huertas… y el segundo triple consecutivo de Bellas. El madrileño se sumó a la fiesta de Oliver y mantuvo la alegría desatada en las gradas del Gran Canaria Arena (71-66, minuto 38).
En los últimos tres minutos el Herbalife Gran Canaria demostró ser capaz de gestionar la ventaja. DeShaun Thomas tuvo, eso sí, un triple desde la esquina a dieciséis segundos para empatar, pero el tiro fue al hierro y ahí se acabó la esperanza del gigante.
Al final, un meritorio 76-70 para el Herbalife Gran Canaria, que sigue luchando con uñas y dientes por un puesto en el Playoff por el título. En tres días, llama la Eurocup para pedir la lista de invitados a los cuartos de final. Los claretianos esperan estar en ella.
