Desde comienzos del actual mandato, la oficina de Consumo del Ayuntamiento de Telde (OMIC), ha ido de mal en peor ante el desinterés de la concejala Marta Hernández (NC), que parece nos prestar atención a ninguna de las áreas que le ha encomendado la Alcaldesa de Telde y a las pruebas nos remitimos, (Agricultura, Mercados, Centro de Alzheimer, Centro de Discapacitados), se une ahora también Consumo.
Es una auténtica vergüenza que el Gobierno de Telde, sepa que desde hace más de un mes las dos personas que tramitaban las denuncias están de baja médica, sin que hasta el momento se haya puesto a nadie a sustituirlas, con lo que los vecinos no están siendo atendidos en sus demandas, ya que las mismas se amontonan sin que nadie las diligencie.
No nos cabe la menor duda, que el Ayuntamiento quiere cargarse la OMIC de Telde, que ha sido una de las mejores que ha funcionado durante muchos años a nivel regional. Por lo pronto está permitiendo que el servicio se desmantele totalmente y el personal que estaba al frente de esta oficina de consumo, que se había formado para llevar este departamento, hoy ejecuta otras tareas en el Ayuntamiento con lo que la labor pedagógica ha desaparecido y se limitan a recoger las quejas de los ciudadanos y punto.
Las oficinas de información al consumidor desempeñan históricamente un papel determinante como intermediarias entre proveedores de bienes y servicios y consumidores, con gestiones de resolución de conflictos y arbitraje previo a la interposición de acciones judiciales, que en estos momentos se vuelven en contra de los ciudadanos de Telde por la obligación de abonar tasas para los pleitos civiles por reclamaciones de consumo, ya que el Ayuntamiento ha dejado in operativo este servicio.
Fuente: Teldealdía.com
