EL GRANCANARIO RAMÓN GONZÁLEZ, MIEMBRO DEL CONSEJO POLÍTICO NACIONAL DE AIREs – LA IZQUIERDA

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Este pasado sábado 26 de marzo se constituyó el Consejo Político Nacional de AIREs – La Izquierda. Fue presidido por el Profesor Emérito de Filosofía Miguel Candel, el cual fue elegido en su cargo en el Congreso Constituyente del partido, que se celebró los pasados 28 y 29 de enero.

El primer punto del orden del día se dedicó a la elección de los cargos de vicepresidente, secretario y vocales del consejo.

Para la Vicepresidencia fue elegido Ramón González Hernández de Las Palmas de Gran Canaria, como secretario José Antonio Góngora Hinojo de Terrassa y como vocales Pilar González Pin de Barcelona y Carlos Sanz Hidalgo de Cuenca.

Tras constituir la mesa se presentaron para su aprobación los programas de trabajo de las diferentes secretarias del Comité Ejecutivo Nacional de AIREs. Un ambicioso plan de trabajo que contempla la expansión y el crecimiento de AIREs como proyecto político en el ámbito nacional y que impulsa a todos los miembros del consejo y a la afiliación a colaborar con él.

Fueron aprobados por unanimidad con la intención del consejo de hacer seguimiento y evaluación de objetivos de cada proyecto.

Se presentaron y aprobaron las cuentas del año 2021, referidas a los gastos realizados en el proceso de legalización del partido.

Se acuerda poner en marcha comisiones de trabajo de apoyo a la labor de las secretarias del Comité Ejecutivo Nacional y comisiones de trabajo propias del Consejo Político Nacional.

Tras un debate en torno a la necesidad de formación de cuadros y afiliados, por un lado; así como reflexiones sobre la situación política internacional, marcada por una guerra indeseable y unos posicionamientos excesivamente maniqueos de los que queremos desmarcarnos, que nos arrastra a una situación de crisis política, económica y social muy grave, se procedió a levantar la sesión.

Tras la elección como primer vicepresidente de AIREs-La Izquierda del canario Ramón González, manifiesta no sólo el gran honor que recibe por su elección y lo que es una gran responsabilidad política, ejercer un cargo orgánico de esta envergadura en una organización como La Alianza de la Izquierda Republicana de España que es un proyecto que se plantea a medio y largo plazo incidir en la política española sin rémoras neo- liberales ni nacionalistas, es un reto organizativo capaz de encuadrar a todos esos cuadros políticos que se han visto descolgados ante los retrocesos de una supuesta izquierda institucionalizada y retrógrada.

El vicepresidente de Aires-La Izquierda puntualiza que: “Hemos puesto en marcha una organización seria que pretende abarcar un espacio político que ha sido relegado. Contamos con un proyecto para España en base a la igualdad, que refuerce nuestro debilitado Estado y ahí no caben privilegios de sangre ni territoriales que, hasta hoy han sido el lugar de repesca de las oligarquías locales, en detrimento del conjunto del pueblo trabajador en general y de la clase obrera en particular. Pero sí para lograr privilegios particulares, muchas veces por encima de la solidaridad con otros pueblos del conjunto del Estado que más lo requieren. Apostamos por un Estado integral. Donde la cooperación y la solidaridad interterritorial figuren como competencias blindadas.

Es hora de entender que el fomento de las pugnas entre determinados lugares del Estado, no ha hecho más que debilitar la acción central, unitaria y su fortaleza, como en el caso de la educación que durante los últimos años se ha agudizado, pero en general desde la constitución del 78, no ha sido más que un baile de leyes, cambios constantes, adaptaciones a planes, privilegios en territoriales, irracionales cuestiones lingüísticas, criterios de evaluación y puntaje distinto, entre otras muchas debilidades, cuando tendríamos que contar con una fuerte implantación a nivel nacional en toda España.

No hay tiempo que perder, lo notamos en el día a día, se materializa en los centros privados que refuerzan a las élites económicas, mientras el detrimento de la pública va a velocidad considerable, se pierde entre planes de orientaciones pedagógicas en pugna y dependiendo del lugar: Proponemos y exponemos a consideración de la sociedad un Sistema Nacional de la Red Pública de Educación, que de homogeneidad y coherencia a un tronco común para toda la Educación Pública en España.  Sin esto el presente y el futuro de nuestro Estado queda en cuestionamiento. Es imprescindible, recuerda el vicepresidente de AIREs-La Izquierda.

El caso de las competencias en sanidad ha sido aún más destacado tras los últimos acontecimientos por el COVID; o bien, el ignorar la sobre explotación de territorios y su no limitación en residencia, como es el caso de las Islas Canarias que evidencia un control y replanteamiento. Mientras en otros muchos lugares de España, se vacían pueblos constantemente, que cuentan con recursos naturales viables, pero la falta de atención y de fondos para incentivar su vida y mantenimiento, obliga a sus habitantes a el abandono e instalación en ciudades donde ya no sólo poder trabajar, sino estudiar, progresar, o simplemente poder desplazarse con cierta comodidad, por no entrar en urgencias vitales.

La constante precarización y limitada modernización social en el empleo, el galopante camino a mayores cuotas de marginación y pobreza, no pueden ser utilizados como reclamos sin poner planes capaces de gestionarlos y pararlos.

En medio de todo, la situación energética se plantea la necesidad de lograr criterios en cuanto a posibilidades y realidades. Mientras en lugares sin agua se pretenden alzar costosos megaproyectos hidráulicos o la puesta en marcha de trenes con costes estrafalarios, recorridos y destrucción evidente, y no sólo en Canarias: en otros puntos de España se suprimen trenes necesarios en esos territorios. Sin la soberanía energética, no alcanzaremos una soberanía nacional real. Los avances en estos campos son meteóricos y no coincidentes con ciertas agendas teledirigidas.

Finaliza Ramón González que en nuestras bases ideológicas somos muy claros y conscientes de que “el neoliberalismo internacional tiende cada vez más hacia la globalización económica, y sólo es posible combatir sus efectos devastadores sobre los trabajadores desde la UNIDAD de acción. Dividir el estado nación en pequeños territorios, sólo beneficia a la oligarquía financiera y perjudica gravemente a la clase trabajadora”.

Florentino López Castro

Florentino López Castro

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