Los afectados comenzaron a indagar con la falta de respuestas y descubrieron que el CIF de Koto Inmobiliaria aportado en los contratos se corresponde realmente con el de la empresa Nexo Crea, misma sociedad que promovió el torneo Managers League en Telde hace un año, en el que participaron exjugadores profesionales, y que terminó en un escándalo y con acusaciones de estafa. El administrador único de Nexo Crea, según consta en el registro mercantil, es Sergio S., el presunto estafador inmobiliario. En la dirección donde supuestamente está la inmobiliaria, en Telde, tampoco hay rastro de él ni de Koto.
En un amasijo de hierros y cemento de un barrio periférico de Las Palmas de Gran Canaria, seis familias depositaron sus sueños y sus ahorros. El esqueleto de un edificio que –según les aseguró en mayo el agente inmobiliario encargado de la venta– estaría reconstruido en mayo de 2025 con ocho exclusivas viviendas preparadas para que entraran a vivir. Los trabajos tendrían que haber empezado a principios de septiembre, pero en Almatriche –barrio en el que se ubica el bloque– no hay rastro de los obreros, tan solo la estructura de un edificio abandonado y no habitable. Tal y como estaba en mayo.
No es culpa de la constructora encargada de las labores: el agente inmobiliario se convirtió en agosto en un fantasma y desapareció del mapa, después de que los compradores le pagaran el porcentaje solicitado para adquirir los pisos. El responsable inmobiliario está denunciado por presuntos delitos de estafa –que podría ascender a una cantidad de 100.000 euros– y falsedad documental.
En marzo de este año, en los portales inmobiliarios de internet se anunció la puesta en marcha de una nueva promoción de viviendas ubicadas en el barrio de Almatriche. Un edificio que solo tiene en pie la estructura y que sería remodelado en su totalidad para dividirlo en ocho pisos. Ese inmueble pertenece a una constructora –que nada tiene que ver con el agente, al que han denunciado– de Las Palmas de Gran Canaria que lo compró en los primeros meses del año con el objetivo de edificarlo. Era su primera promoción de viviendas pusieron la venta en manos de una empresa inmobiliaria en la que trabajaba Sergio S., el agente señalado.
«En abril, él se ofrece como agente. Nos explica que va a dejar la inmobiliaria y montar una en solitario, y nos garantiza que en unos meses tendrá la promoción vendida. Nosotros no tenemos medios para publicitar los pisos como Dios manda, así que confiamos», explica el dueño de la constructora, que prefiere que su nombre no sea revelado.
La prerreserva
Sergio crea Koto Inmobiliaria, responsable de la venta de los ocho pisos. «Nos fiamos», se lamenta ahora el constructor. «Lo peor no es el tiempo perdido ni el dinero.Lo peor es que ha jugado con las familias», añade. La empresa está en contacto con al menos dos compradores que se han sumado a la denuncia por presunta estafa.
Uno de ellos es Borja Casillas, que se interesó en abril por los pisos. «Me cita en la inmobiliaria en la que trabajaba, me enseña los renders de las viviendas y me explica que, en caso de estar interesado, tengo que pagar una prerreserva de 5.000 euros», cuenta sobre los primeros pasos que dio. Durante unos días, Borja se lo piensa y, al final, accede.
Tras enviar sus nóminas, ver si sería candidato a la adjudicación de una hipoteca y pagar los 5.000 euros, Sergio le manda el contrato de compra del que sería su futuro piso. Las condiciones, como en otros negocios, consistían en pagar el 10% del importe del piso en el momento de la firma del contrato y otro 10% en diciembre. De ese porcentaje se descontarían los 5.000 euros de la prerreserva. Borja –al igual que el otro matrimonio que ha denunciado– pagó un total de 19.600 euros al agente inmobiliario.
Seis de las ocho casas
A finales de mayo, él creía que era ya propietario. Pero pasaron los meses y se encendieron las alarmas. La primera semana de agosto, el comercial le confirma que el 3 de septiembre empezarían las obras y que ha vendido ya seis de las ocho viviendas. Si esa cifra es cierta y todos pagaron lo mismo, el importe del presunto fraude asciende a más de 100.000 euros.
«El 3 de septiembre fui al edificio y no había nada, creí que era normal, que sería un retraso», explica el afectado, pero unos días más tarde recibió un correo del dueño de la constructora: no conseguía contactar desde principios de agosto con el agente inmobiliario, justo la última fecha en la que Borja también había hablado con él.
Al constructor, el comercial también le aseguró que tenía vendidas seis de las ocho viviendas. «Necesitaba el listado de compradores que habían pagado la prerreserva para solicitar en el banco el crédito promotor y poder hacer las obras. Él me da largas y largas… Hasta que a principios de agosto deja de recibir los mensajes y no contesta a las llamadas», asevera el constructor.
Con la mosca detrás de la oreja, decide contactar con el primero de los compradores, Borja, del que el agente le había hablado. Todas las alarmas se encendieron y comenzaron las sospechas. En esos días contacta con la constructora el otro matrimonio comprador, también víctima de la presunta estafa. «Les dije todo lo que sé. No tengo nada que esconder, ni siquiera sé si ahora puedo ser responsable subsidiario o nos pueden reclamar al ser también los productores», añade con pesar el empresario.
Los estafados se pusieron en contacto con los teléfonos que tenían de Sergio. No hubo respuesta en ninguno. En el momento de escribir este artículo, siguen sin tener noticias de él. El número de la inmobiliaria –cuya cuenta corporativa no se conecta a WhatsApp desde el 13 de agosto– y su número personal no está disponible. Fuentes consultadas por este periódico aseguran que está en la prisión de Salto del Negro por un caso ajeno a la presunta estafa inmobiliaria y al escándalo de la Managers League.
El mismo CIF que la Managers League
Los afectados comenzaron a indagar con la falta de respuestas y descubrieron que el CIF de Koto Inmobiliaria aportado en los contratos se corresponde realmente con el de la empresa Nexo Crea, misma sociedad que promovió el torneo Managers League en Telde hace un año, en el que participaron exjugadores profesionales, y que terminó en un escándalo y con acusaciones de estafa. El administrador único de Nexo Crea, según consta en el registro mercantil, es Sergio S., el presunto estafador inmobiliario. En la dirección donde supuestamente está la inmobiliaria, en Telde, tampoco hay rastro de él ni de Koto.
«Nos cogió de tontos», se lamenta el constructor, que lo ha denunciado también por presunta falsedad documental al usar el sello de su empresa en los contratos que él nunca llegó a rubricar. «Creemos que puede haber más gente afectada con la que no tenemos contacto», dice. Los afectados denunciaron en septiembre en la comisaría de Policía Nacional Distrito Centro (Siete Palmas). Las viviendas se han dado de baja ya en los portales inmobiliarios de internet, aunque su página web sigue activa. «Tu hogar, tu sueño. Propiedades exclusivas para ti» es su lema.
La Provincia-Dlp (Carlota Barcala)