La Policía Local realizó la pasada semana una nueva campaña de prevención en las carreteras del municipio y entre los días 4 al 10 de octubre realizaron controles intensivos para detectar el consumo de alcohol y drogas durante la conducción.
El concejal de Seguridad, Agustín Arencibia, explica que durante esos días se intensificaron los puntos de control en las vías urbanas de competencia municipal, que dieron como resultado 34 diligencias instruidas, ocho de ellas alcoholemias judiciales, 25 alcoholemias que conllevaron 4 puntos de retirada del permiso de conducción y 500 euros de multa, 2 administrativas que conllevaron 6 puntos de retirada del permiso de conducción y 1.000 euros de multa, además de 4 diligencias por conducir con drogas en el organismo.
Estos controles, señala el edil, tienen como objetivo prevenir que personas que han bebido o consumido drogas circulen por las carreteras y reducir así el riesgo de accidentes. En ese sentido, recuerda que con una tasa de alcoholemia de 1,5 gramos por litro, la tasa de incidencia de accidentes de gravedad mortal es aproximadamente 200 veces mayor que cuando se trata de conductores que no han ingerido alcohol.
Con estos controles frecuentes, la Policía Local de Telde intenta persuadir a los conductores de ponerse al volante tras haber ingerido algún tipo de sustancia psicoactiva, algo que puede conllevar incluso penas de prisión de tres a seis meses o multa de seis a doce meses, y privación del derecho a conducir de uno hasta cuatro años.
Además, el Código Penal, tras su última reforma, establece que, si de forma imprudente, se cometen homicidios o lesiones graves por conducir bajo los efectos del alcohol u otras drogas o a una velocidad excesiva, esta conducta pasará automáticamente a ser considerada imprudencia grave. Las penas serán de entre 1 y 4 años de cárcel en caso de muerte y hasta 1 año en caso de lesiones.
