Día: 17 de abril de 2020
«Un mes de lucha, resistencia y esperanza»
Ya hemos superado el mes de confinamiento forzoso, obligados por una crisis sanitaria sin precedentes que ha puesto contra las cuerdas al planeta entero, y nos ha obligado a todos a improvisar soluciones y remedios sobre la marcha.
Los trabajadores, como el resto de la sociedad, están sufriendo duramente las consecuencias de esta situación, y la incertidumbre ante el futuro es la nota predominante entre todos.
Desde SITCA hemos desplegado todos nuestros recursos humanos para dar en estos momentos toda la información, el apoyo y asesoramiento legal y en muchas ocasiones simplemente el acompañamiento a miles de trabajadores que se encuentran desorientados ante el ejercicio de sus derechos laborales.
A modo de resumen, hacemos constar algunos de los datos que han marcado nuestra actividad en el último mes:
Más de 2300 consultas telefónicas.
Más de 120 ERTE negociados, para proteger los derechos de los trabajadores.
Más 200 consultas personales.
Más de 160 denuncias presentadas.
Se ha evitado más de 400 despidos por la actuación de SITCA.
Más de 20 denuncias a empresas para que pagaran el salario a sus trabajadores.
Más 600 declaraciones de la renta del 1 al 14 de abril por vía telemática, para evitar desplazamientos de los trabajadores.
Más de 30 ERTE denunciados por estar en fraude.
Se ha remitido información a más de 130.000 trabajadores sobre el Covid-19, derechos de trabajadores, información legislativa, etc..
Once campañas de conciencian sobre la protección, la importancia de quedarse en casa y sobre derechos sociales de las medidas que aprobó el Gobierno.
En estos momentos de dificultades, esta Central Sindical ha querido mantener el pulso, redoblando esfuerzos para que los trabajadores no se sientan abandonados.
Queremos decirles que no están solos, que en SITCA van a encontrar siempre un puerto seguro al que arribar en medio de tanta zozobra.
Queremos mandarles ánimo, resistan, no están solos, y juntos saldremos de ésta, sin dejar a nadie en el camino.
Ánimo, seguimos en la lucha.
Antonio Rodríguez, secretario general de SITCA
SITCA: UN MES DE LUCHA, RESISTENCIA Y ESPERANZA
Ya hemos superado el mes de confinamiento forzoso, obligados por una crisis sanitaria sin precedentes que ha puesto contra las cuerdas al planeta entero, y nos ha obligado a todos a improvisar soluciones y remedios sobre la marcha.
Los trabajadores, como el resto de la sociedad, están sufriendo duramente las consecuencias de esta situación, y la incertidumbre ante el futuro es la nota predominante entre todos.
Desde SITCA hemos desplegado todos nuestros recursos humanos para dar en estos momentos toda la información, el apoyo y asesoramiento legal y en muchas ocasiones simplemente el acompañamiento a miles de trabajadores que se encuentran desorientados ante el ejercicio de sus derechos laborales.
A modo de resumen, hacemos constar algunos de los datos que han marcado nuestra actividad en el último mes:
Más de 2300 consultas telefónicas.
Más de 120 ERTE negociados, para proteger los derechos de los trabajadores.
Más 200 consultas personales.
Más de 160 denuncias presentadas.
Se ha evitado más de 400 despidos por la actuación de SITCA.
Más de 20 denuncias a empresas para que pagaran el salario a sus trabajadores.
Más 600 declaraciones de la renta del 1 al 14 de abril por vía telemática, para evitar desplazamientos de los trabajadores.
Más de 30 ERTE denunciados por estar en fraude.
Se ha remitido información a más de 130.000 trabajadores sobre el Covid-19, derechos de trabajadores, información legislativa, etc..
Once campañas de conciencian sobre la protección, la importancia de quedarse en casa y sobre derechos sociales de las medidas que aprobó el Gobierno.
En estos momentos de dificultades, esta Central Sindical ha querido mantener el pulso, redoblando esfuerzos para que los trabajadores no se sientan abandonados.
Queremos decirles que no están solos, que en SITCA van a encontrar siempre un puerto seguro al que arribar en medio de tanta zozobra.
Queremos mandarles ánimo, resistan, no están solos, y juntos saldremos de ésta, sin dejar a nadie en el camino.
Ánimo, seguimos en la lucha.
Antonio Rodríguez, secretario general de SITCA
TELDE PREGUNTA SOBRE LA PUESTA EN MARCHA DEL INGRESO CANARIO DE EMERGENCIA
El alcalde de Telde, Héctor Suárez, junto los alcaldes y alcaldesas del resto de municipios que forman el G4, Las Palmas de Gran Canaria, Santa Cruz de Tenerife y La Laguna, mantuvieron este viernes una nueva reunión con el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, en aras de continuar realizando un seguimiento a la crisis generada por el coronavirus en los cuatro núcleos más poblados del Archipiélago, así como las medidas tomadas por el Ejecutivo regional y las distintas administraciones públicas y analizar las acciones a implementar en el futuro a corto plazo.
Héctor Suárez, Augusto Hidalgo, Patricia Hernández y Luis Yeray Gutiérrez solicitaron a Ángel Víctor Torres conocer el sistema para poner en marcha el Ingreso Canario de Emergencia. Se trata de una renta destinada a aquellos sectores más vulnerables de la población de Canarias, personas que han perdido su puesto de trabajo y no reciben ningún tipo de prestación. Los ediles mostraron su preocupación por el desarrollo de esta renta, de tal manera que su puesta en vigor evite el colapso los Servicios Sociales municipales y los trabajadores y trabajadoras de los ayuntamientos puedan desarrollar su actividad de una manera efectiva, dando respuesta a las familias más vulnerables.
Además, los ediles solicitaron al presidente canario que los fondos que llegan desde el Estado se empleen en atender las necesidades derivadas de la pobreza y la exclusión social, “de tal manera que lleguen a quienes más les hace falta, las familias más vulnerables, que son a quienes tenemos que prestan toda nuestra ayuda y atención en estos momentos para no dejar a nadie atrás”, apuntó el alcalde de Telde.
En este sentido, los regidores municipales pidieron nuevamente a Torres que exija al Gobierno central la utilización del superávit y de los remanentes de Tesorería por parte de los ayuntamientos. “Ese dinero -aclara Suárez- nos permitiría atender a corto plazo las demandas sociales y económicas que tenemos los municipios, además de generar planes para el futuro e intentar paliar, de la mejor manera posible, los efectos adversos de esta crisis generada por el COVID-19”.
Finalmente, demandaron que el reparto de las mascarillas llegue a toda la población canaria, de tal manera que la ciudadanía disponga de este medio de protección.
EL ALCALDE DE TELDE ANIMA A DONAR SANGRE PARA DAR RESPUESTA A LOS HOSPITALES POR EL CORONAVIRUS
El alcalde de Telde, Héctor Suárez, acudió este viernes a donar sangre a la unidad de donación que el Instituto Canario de Hemodonación y Hemoterapia (ICHH) tiene instalada en la sala de exposiciones de las Casas Consistoriales de Telde desde el pasado 6 de abril, para dar respuesta a las necesidades de los hospitales canarios durante el estado de alarma por el COVID-19.
Suárez animó a la población a sumarse a la causa y afirmó: “Donar sangre también es una manera de colaborar en esta situación de crisis sanitaria que estamos viviendo. Es muy importante aportar nuestro granito de arena, ya que de esta manera contribuimos con los hospitales canarios que demandan la ayuda de todos y todas ahora más que nunca para cubrir sus necesidades, y en este sentido, la ciudadanía teldense está dando un ejemplo de solidaridad”.
Así, la unidad de donación del ICHH, que en un primer momento permanecería en el municipio hasta el próximo 26 de abril, se mantendrá unas semanas más tras la gran acogida que está teniendo por parte de los donantes.
Se recuerda que, con el fin de evitar aglomeraciones de personas y garantizar así el respeto de las medidas de seguridad, sólo se podrá acudir a donar sangre con cita previa, bien a través del teléfono 900 234 061 o bien a través de la web www.efectodonación.com. El horario habilitado para donar es de 9:00 horas a 13:30 horas y de 16:00 horas a 20:30 horas.
El ICHH está contactando además con las personas que forman parte de su base de datos de donantes habituales para animarles a acudir a la unidad instalada en las Casas Consistoriales.
«Las diferentes fases de la crisis del covid-19»
El influyente filósofo alemán Karl Theodor Jaspers definió la crisis como una época de transición donde ´todo sufre un cambio súbito del que el individuo sale transformado, dando origen a una nueva resolución, o yendo hacia la decadencia. La historia de la vida no sigue el curso uniforme del tiempo; estructura el propio tiempo cualitativamente, impulsa el desarrollo de las experiencias al extremo de hacer inevitable la decisión.
En el campo de la psicología se distinguen dos tipos de crisis, las evolutivas o de desarrollo y las accidentales. Las primeras, como la crisis de la adolescencia, de la madurez, de la menopausia o de la ancianidad, están asociadas al desarrollo biológico, pero también al contexto social de cada persona, pues las gestiones de las mismas están modeladas por el modelo cultural donde está inmerso el individuo. En cuanto a las segundas, a las accidentales, como una enfermedad grave, la pérdida de un ser querido, o de un bien material, o un cambio inesperado y súbito en el trabajo, son cambios imprevistos, y con frecuencia traumáticos, que amenazan el equilibrio psicológico de las personas.
De esta forma, podemos definir la crisis del COVID-19 como un suceso imprevisto, accidental y traumático que, con más o menos severidad, está poniendo en riesgo nuestro equilibrio psicológico.
Pero, como señala K. Theodor, de este cambio el individuo puede salir transformado para adaptarse mejor a la nueva situación generada por la crisis, o, como él también apunta, ir hacia la decadencia. Todo va a depender de los recursos que disponga la persona para gestionar la crisis. Uno de los recursos que ayudan a superar estas crisis accidentales de forma saludable es el modelo utilizado por los psicoterapeutas para ayudar a las personas a superar sus procesos de duelo.
Según el modelo de elaboración del duelo, las personas van superando una serie de etapas, hasta llegar al final del proceso más fortalecidos que cuando iniciaron el mismo.
Ante el fallecimiento de un ser querido, comenzamos nuestro proceso de duelo con una fase de ´negación´ de su fallecimiento.
A esta primera fase le sigue la de ´enfado´. Nos enfadamos con el personal sanitario que lo atendió, con el familiar encargado de cuidarlo, incluso, por enfadarnos, nos enfadamos hasta con Dios, que permitió que falleciera.
A esta fase de enfado le sigue otra fase, la de ´depresión´. Creemos que jamás vamos a poder superar su pérdida o que, con su fallecimiento, la vida ha dejado de tener sentido para nosotros.
Superada la fase de depresión, entramos en una nueva, la de ´aceptación´ de la pérdida. Aceptamos la ausencia del ser querido y construimos otros modelos de relación social y familiar donde ya no está presente el fallecido.
De este proceso de la elaboración de unos nuevos modelos de vida nace la última fase del proceso de elaboración del duelo, ´el aprendizaje´. Con el aprendizaje se cierra un proceso de duelo, más o menos dilatado, de una forma saludable.
Así, la articulista Pilar Jericó, inspirándose en este modelo por etapas de elaboración y superación del duelo, ha elaborado otro modelo que nos puede ayudar a comprender y superar de forma saludable la pandemia producida por el COVID-19.
El modelo de Pilar Jericó comienza por la fase de ´llamada´, cuando nos enteramos de que en China hay un nuevo virus.
Igual que en el modelo del duelo, a la de llamada le sigue la fase de ´negación´. Nos negamos a creer que el virus pueda llegar hasta nosotros.
Superada la fase de negación, aparece la de ´rabia´. En esta fase, en la de rabia, igual que en la del duelo, culpamos a los demás de que se haya producido la epidemia. Así, por ejemplo, hemos cuestionado al Gobierno por no haber tomado medidas antes de que se propagara el virus ¿Por qué no suspendió las manifestaciones del 8 de marzo? ¿Por qué no se activó antes el estado de alarma? Por qué no se cerraron antes las fronteras?…
Superada la fase de rabia, entramos en una nueva fase, la de ´miedo´. En ella comenzamos a temer por nuestra salud, por la de nuestra familia y del resto de las personas que nos rodean.
Si en el modelo del duelo la fase de depresión daba paso a la de aceptación, en el modelo de Jericó sucede lo mismo, la etapa de miedo también da paso a la de ´aceptación´ de la epidemia. Estoy triste, me siento vulnerable…
Aceptar que existe una pandemia del virus COVID-19 significa tener que adquirir nuevos hábitos, como aprender a cuidarse, cómo ayudar a los demás, comenzar a creer en los que nos están enseñado a superar la crisis, confiar en el trabajo de los sanitarios… Es decir, de la fase de aceptación pasamos a la que Jericó denomina ´nuevos hábitos y confianza´. Es precisamente en la fase de nuevos hábitos y confianza donde la mayoría de nosotros nos encontramos en estos momentos.
La fase ´pandemia pasa´, la última de las fases del modelo de Jericó, significa que una vez superada la pandemia de forma saludable no solo habremos conseguido aprender de ella, también nos vamos a sentir más fuertes para afrontar y superar otras tragedias futuras que puedan poner en peligro nuestra salud mental o física.
José Juan Sosa Rodríguez es psicólogo general sanitario y experto en Psicología de Emergencias y Catástrofes
LAS DIFERENTES FASES DE LA CRISIS DEL COVID-19
El influyente filósofo alemán Karl Theodor Jaspers definió la crisis como una época de transición donde ´todo sufre un cambio súbito del que el individuo sale transformado, dando origen a una nueva resolución, o yendo hacia la decadencia. La historia de la vida no sigue el curso uniforme del tiempo; estructura el propio tiempo cualitativamente, impulsa el desarrollo de las experiencias al extremo de hacer inevitable la decisión.
En el campo de la psicología se distinguen dos tipos de crisis, las evolutivas o de desarrollo y las accidentales. Las primeras, como la crisis de la adolescencia, de la madurez, de la menopausia o de la ancianidad, están asociadas al desarrollo biológico, pero también al contexto social de cada persona, pues las gestiones de las mismas están modeladas por el modelo cultural donde está inmerso el individuo. En cuanto a las segundas, a las accidentales, como una enfermedad grave, la pérdida de un ser querido, o de un bien material, o un cambio inesperado y súbito en el trabajo, son cambios imprevistos, y con frecuencia traumáticos, que amenazan el equilibrio psicológico de las personas.
De esta forma, podemos definir la crisis del COVID-19 como un suceso imprevisto, accidental y traumático que, con más o menos severidad, está poniendo en riesgo nuestro equilibrio psicológico.
Pero, como señala K. Theodor, de este cambio el individuo puede salir transformado para adaptarse mejor a la nueva situación generada por la crisis, o, como él también apunta, ir hacia la decadencia. Todo va a depender de los recursos que disponga la persona para gestionar la crisis. Uno de los recursos que ayudan a superar estas crisis accidentales de forma saludable es el modelo utilizado por los psicoterapeutas para ayudar a las personas a superar sus procesos de duelo.
Según el modelo de elaboración del duelo, las personas van superando una serie de etapas, hasta llegar al final del proceso más fortalecidos que cuando iniciaron el mismo.
Ante el fallecimiento de un ser querido, comenzamos nuestro proceso de duelo con una fase de ´negación´ de su fallecimiento.
A esta primera fase le sigue la de ´enfado´. Nos enfadamos con el personal sanitario que lo atendió, con el familiar encargado de cuidarlo, incluso, por enfadarnos, nos enfadamos hasta con Dios, que permitió que falleciera.
A esta fase de enfado le sigue otra fase, la de ´depresión´. Creemos que jamás vamos a poder superar su pérdida o que, con su fallecimiento, la vida ha dejado de tener sentido para nosotros.
Superada la fase de depresión, entramos en una nueva, la de ´aceptación´ de la pérdida. Aceptamos la ausencia del ser querido y construimos otros modelos de relación social y familiar donde ya no está presente el fallecido.
De este proceso de la elaboración de unos nuevos modelos de vida nace la última fase del proceso de elaboración del duelo, ´el aprendizaje´. Con el aprendizaje se cierra un proceso de duelo, más o menos dilatado, de una forma saludable.
Así, la articulista Pilar Jericó, inspirándose en este modelo por etapas de elaboración y superación del duelo, ha elaborado otro modelo que nos puede ayudar a comprender y superar de forma saludable la pandemia producida por el COVID-19.
El modelo de Pilar Jericó comienza por la fase de ´llamada´, cuando nos enteramos de que en China hay un nuevo virus.
Igual que en el modelo del duelo, a la de llamada le sigue la fase de ´negación´. Nos negamos a creer que el virus pueda llegar hasta nosotros.
Superada la fase de negación, aparece la de ´rabia´. En esta fase, en la de rabia, igual que en la del duelo, culpamos a los demás de que se haya producido la epidemia. Así, por ejemplo, hemos cuestionado al Gobierno por no haber tomado medidas antes de que se propagara el virus ¿Por qué no suspendió las manifestaciones del 8 de marzo? ¿Por qué no se activó antes el estado de alarma? Por qué no se cerraron antes las fronteras?…
Superada la fase de rabia, entramos en una nueva fase, la de ´miedo´. En ella comenzamos a temer por nuestra salud, por la de nuestra familia y del resto de las personas que nos rodean.
Si en el modelo del duelo la fase de depresión daba paso a la de aceptación, en el modelo de Jericó sucede lo mismo, la etapa de miedo también da paso a la de ´aceptación´ de la epidemia. Estoy triste, me siento vulnerable…
Aceptar que existe una pandemia del virus COVID-19 significa tener que adquirir nuevos hábitos, como aprender a cuidarse, cómo ayudar a los demás, comenzar a creer en los que nos están enseñado a superar la crisis, confiar en el trabajo de los sanitarios… Es decir, de la fase de aceptación pasamos a la que Jericó denomina ´nuevos hábitos y confianza´. Es precisamente en la fase de nuevos hábitos y confianza donde la mayoría de nosotros nos encontramos en estos momentos.
La fase ´pandemia pasa´, la última de las fases del modelo de Jericó, significa que una vez superada la pandemia de forma saludable no solo habremos conseguido aprender de ella, también nos vamos a sentir más fuertes para afrontar y superar otras tragedias futuras que puedan poner en peligro nuestra salud mental o física.
José Juan Sosa Rodríguez es psicólogo general sanitario y experto en Psicología de Emergencias y Catástrofes
EL AYUNTAMIENTO DE TELDE ANUNCIA UNA DEMANDA CONTRA FCC
La Junta de Gobierno Local aprobó ayer, en una sesión extraordinaria, recurrir a la vía judicial para solicitar a Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), la empresa que hasta el pasado mes de febrero se encargaba de la limpieza viaria y de la recogida de residuos en la ciudad, la devolución de la maquinaria con la que realizaba el servicio. Esta entrega debería haberse ejecutado después del cambio de adjudicataria, pero la misma no se ha realizado a pesar de los continuados requerimientos del Consistorio. Telde, por lo tanto, entiende que se ha incumplido con el contrato y presentará una demanda por la vía contencioso-administrativa contra FCC.
La entidad que actualmente realiza las labores de recogida de basura por sentencia judicial, la UTE Santana Cazorla-Valoriza, se ha visto obligada a alquilar con recursos propios la maquinaría con la que ha estado trabajando en las calles del municipio en los últimos meses y con la que, desde que se decretó el estado de alarma, ha intensificado las labores de limpieza y desinfección para contener la propagación del virus. Dicha sentencia obligó también a que volviera a entrar en vigor el contrato que se firmó en 2009, por lo que se esperaba que se dotase al servicio de la maquinaria anterior a los recortes que impuso el plan de ajuste. Pero de momento ni siquiera se ha recuperado la del año pasado.
Canarias7
DETENIDO EN TELDE EL AUTOR DEL INCENDIO DE VARIOS COCHES EN JINÁMAR
El arrestado compró supuestamente varios litros de combustible en una gasolinera cercana, para verterlo a continuación sobre la chapa de algunos coches estacionados en la calle Fernando Sagaseta como informó en primicia ONDA GUANCHE. Varias dotaciones de bomberos sofocaron el incendio, que calcinó finalmente cuatro vehículos.
Agentes de la Policía Nacional han detenido en el municipio de Telde a un hombre de 31 años de edad, con 17 antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de daños intencionados. El mismo compró supuestamente varios litros de combustible en una gasolinera del valle de Jinámar, vertiéndolo a continuación sobre la chapa de algunos coches estacionados en la calle Fernando Sagaseta. Varias dotaciones de bomberos sofocaron el incendio, que calcinó finalmente cuatro coches.
La noche del pasado viernes, numerosos vecinos del polígono de Jinámar llamaron al teléfono 091 comunicando que varios coches estacionados en la calle Fernando Sagaseta estaban ardiendo en ese momento.
Al lugar acudieron varias dotaciones de bomberos, que sofocaron el incendio utilizando para ello 2.500 litros de agua.
Los funcionarios policiales pudieron comprobar que hasta cuatro coches habían quedado calcinados, además de un contenedor que había sido dañado por las llamas.
La investigación policial permitió identificar plenamente al presunto autor de los hechos, un hombre de 31 años de edad y vecino del propio polígono de Jinámar.
El mismo habría acudido supuestamente hasta una gasolinera del valle de Jinámar donde compró varios litros de combustible, para verterlo a continuación sobre la chapa de los coches afectados.
Una vez localizado en el municipio de Telde, el presunto autor de los hechos fue detenido por un delito de daños intencionados.
Las gestiones policiales permitieron comprobar que el arrestado contaba además con una orden de detención en vigor dictada por un juzgado de instrucción de San Bartolomé de Tirajana.
Canarias7