Si el PGO debe ser la herramienta estratégica, a largo plazo, del desarrollo y crecimiento económico y social del municipio, el Presupuesto del Ayuntamiento debe ser la herramienta táctica, a corto plazo, para crear el “ambiente” favorable a que ese crecimiento y desarrollo sean posibles y sostenibles.
Ambas, PGO y Presupuesto, son herramientas políticas. Somos los políticos que, como resultado de la voluntad de los vecinos, les representamos en el Salón de Plenos, quienes tenemos la obligación de tener un concepto claro de desarrollo para Telde y los que debemos defenderlo, tanto en el Salón de Plenos como ante los propios vecinos.
En contra de estos conceptos elementales de gobierno democrático, en las últimas semanas el gobierno tripartito del PP-CC-CCN nos ha demostrado a todos que ocupa el poder pero no gobierna.
A finales de enero, en tiempo de descuento pre-electoral, el gobierno municipal nos presentó a aprobación inicial un PGO para Telde que lleva más de diez años en fase de proyecto, en la que cada concejal de urbanismo que lo ha tenido en sus manos ha tirado los Convenios del antecesor y ha firmado los que él ha creído conveniente. Ejemplo de ello fueron los reproches del señor Reyes al concejal de urbanismo, señor Rodríguez, que le ha contestado, en la prensa claro, “yo solo me fío de los Convenios que yo firmo”. ¿Qué cree el señor Rodríguez que esconden los Convenios firmados por el señor Reyes, su antiguo compañero de gobierno?
Prisas no explicadas ni razonadas en aprobar un PGO que tendrán como consecuencia que los vecinos sigamos pagando honorarios profesionales a la empresa redactora del Plan General porque los expertos nos dicen que no será aprobado por las instancias correspondientes del Gobierno de Canarias. Aunque sea mayoritariamente del mismo partido que el señor Rodríguez, Don Pablo, concejal de urbanismo. Consciente del efecto de sus propias prisas ya se ha puesto la tirita antes de la herida declarando en los medios “seremos generosos con las enmiendas”. Lo cual, además, demuestra un concepto de posesión privada y particular del PGO escasamente democrático, puesto que es un instrumento de todos los vecinos porque a todos nos afecta.
Semanas después, en el pleno de aprobación de los Presupuestos de 2015, nos hemos encontrado con un nuevo episodio de desgobierno, con la escenificación en el Salón de Plenos de que la ocupación del poder y la nómina a fin de mes es lo único que preocupa a los miembros del tripartito.
Dentro del presupuesto de 2015 aprobaron pagarse sueldos superiores a los 3.000 euros mensuales hasta el mes de mayo. Incluso la señora alcaldesa se ha puesto un sueldo superior al del señor Cardona, alcalde Las Palmas, y muy cercano al sueldo del señor Rivero, Presidente del Gobierno de Canarias.
Pero esos sueldos no les parecen suficientes para sentirse obligados a defender el mismo Presupuesto en el que los incluyen y que llevaban a aprobación. Así que guardaron absoluto silencio y sentaron, otra vez, ilegalmente, otra vez, al señor López, Don Darío, Coordinador de Economía, en el Salón de Plenos para que les hiciera el trabajo y les prestara el servicio de ocultar el desgobierno completo en el que el tripartito termina la legislatura.
El señor López, desconoce el capítulo primero del gobierno democrático y que en Más por Telde defendemos: para ocupar un lugar en el Salón de Plenos y en los medios de comunicación para hablar de política municipal, antes, se debe uno someter al dictado de las urnas. Debe pedir el voto a los vecinos y éstos deben darle su aprobación en unas elecciones.
Sin embargo, el Coordinador, está empeñado en ocupar un lugar que, una práctica democrática no le corresponde y en una práctica legal, no cumple con las normas municipales.
Empezó la legislatura en 2011 ocupando un lugar como concejal no electo en virtud de la Ley de Grandes Ciudades que el señor Aznar diseñó a la medida del señor Gallardón, porque las presiones, no se me ocurriría llamarlo chantajes, de los candidatos del PP en Madrid a la dirección de su partido no son invento de la señora Aguirre y tienen ilustres antecedentes.
Lógicamente, el TC declaró inconstitucional el engendro de los concejales no electos y el señor López perdió su puesto. Pero no dejó de cobrar de los impuestos de los vecinos ni una nómina puesto que su partido, el PP, con el apoyo incondicional de los señores Reyes y Rodríguez, le nombró inmediata e ilegalmente, de nuevo, Coordinador de Hacienda. Y en calidad de tal, se presentó en el Pleno de aprobación del Presupuesto de 2015 que ninguno de los 14 miembros del gobierno se atrevió a defender.
Pero aunque no le guste, el señor López, es un empleado municipal en un puesto directivo y su presencia en el Salón de Plenos está regulada en el artículo 79 del Reglamento Orgánico del Pleno y su Comisiones, cuyos apartados 3,4 y 5 fueron plenamente incumplidos por el compareciente, y por la señora alcaldesa que debe hacer constar dicha comparecencia en el Orden del Día del Pleno.
Aunque en principio, una vez más, se negará, le dejan al señor secretario la “papa caliente” de informar sobre la ilegalidad cometida e informar si ello invalida la aprobación del presupuesto de 2015.
El tripartito se despide del poder en mayo y lo hace en la ilegalidad continua en la que se instaló hace cuatro años en compañía de CIUCA y PR2015 (antigua CC). Considera que el mandato recibido de los vecinos es un “cheque en blanco” para actuar a su antojo sin respeto alguno a la legalidad municipal, como si el ayuntamiento fuera un solar en el Salobre Golf de su propiedad. Pero no lo es. Vuelvo y repito lo que ya hemos expuesto en otras ocasiones desde Más por Telde. Ocupar el poder no es gobernar.
El gobierno es una encomienda de los vecinos para que sirvamos a los intereses de todos, y el capítulo primero de esa encomienda el servicio a los más castigados y perjudicados por las políticas del gobierno del PP. Nunca para servir a los intereses de unos pocos, aunque se encuentren en el propio ayuntamiento. Gobernar implica rendir cuentas a los vecinos sobre lo hecho por cada partido político con el mandato que ellos nos dieron a cada uno en 2011. Y los vecinos deberán decidir a quienes le dan un nuevo mandato en el mes de mayo para otros cuatro años.
(*) Juan Francisco Artiles Carreño, portavoz de Más por Telde
